En el sudeste de Córdoba en los últimos dos meses hubo zonas con 600 mm y preocupan los campos anegados


Lotes inundados y cosechas ya perdidas. Lagunas de agua que no drenan, lluvias intensas que las alimentan.

Los productores del norte de Santa Fe, Chaco y Santiago del Estero chequean los pronósticos a toda hora y buscan, con la esperanza de quien solo ha visto lluvia en los últimos días, un rayo de sol. Sin embargo, también hay anegamientos en el sudeste de Córdoba. Y esto es lo que reflejó Mauricio Groppo, director del programa genético de La Sultana, una reconocida cabaña ubicada en Morrison, cerca de Bell Ville, Córdoba. Su voz transmite preocupación e incertidumbre. «Estamos muy complicados: ahora no está lloviendo pero hay pronósticos de precipitaciones hasta el jueves. Ayer llovió mucho y eso complicó el panorama», afirmó. Además, contó que después del 1° de enero cayeron dos lluvias que sumaron 145 milímetros. Los pronósticos son billetes de lotería. Ni siquiera en ellos pueden confiar: mientras que la previsión de lluvias en la zona para ayer era de cinco milímetros, terminaron cayendo entre 120 y 150 mm.

Groppo explicó que en la zona llovieron unos 600 milímetros en dos meses, cuando la media anual es de 800. «El suelo está saturado. Recién cuando se drene el agua vamos a saber en qué condiciones estamos. Hay pasturas como la alfalfa que seguro vamos a perder. También estamos preocupados por el maíz de segunda, que tiene la planta recién nacida y está completamente bajo agua. Con los animales por el momento estamos bien porque teníamos reservas de alimento», dijo el asesor, de 46 años. La Sultana lleva más de 55 años trabajando en la producción de la genética Brangus y Angus, y tiene diez podios entre hembras y machos en la Rural. En la Exposición Rural de Palermo del año pasado un toro de la cabaña La Sultana y Lanusse Lazcano Agronegocios se consagró Gran Campeón Macho Brangus.

Fuente: La Nación/Campo