Las inundaciones causarían pérdidas por mas de $ 3 mil millones.

Las pérdidas por cultivos de soja de primera por la inundación de campos rondan los u$s1.200 millones por la afectación de 4,5 millones de hectáreas en el corazón del núcleo oleaginoso argentino, cifra que podría más que duplicarse si se le incluye la mortandad de animales, daño de cultivos, pasturas e insumos, y la destrucción de equipos, según se refiere en informes privados.

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Al respecto, desde Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe se indicó, según estimaciones propias, que las pérdidas en el distrito por anegamiento de campos, daño de cultivos y mortandad de animales ronda los u$s2.500 millones.

El ruralismo santafesino consignó que esto es consecuencia de la inundación de campos producida por lluvias atípicas de entre 300 y 500 milímetros, las cuales interrumpieron caminos rurales, rutas provinciales y nacionales y también llevaron a la pérdida de rindes y mortandad de animales.

El ruralismo admite que la recomposición del sector para retomar la actividad productiva en campos que hoy están bajo el agua llevará varios meses, y en algunos casos habrá que esperar hasta fin de año para recuperar la tierra para la producción.

En diálogo con la agencia de noticias DyN, Dardo Chiesa, titular de Confederaciones Rurales Argentinas, reconoció que el impacto de las inundaciones “es enorme” y con “pérdidas millonarias, no solo en cultivos como soja, sino también en lechería y ganadería, donde hay mortandad de vacas, terneros y cerdos. Recomponer esto va a llevar tiempo y apoyo oficial”.

Datos evaluados por equipos técnicos de la Sociedad Rural Argentina dan cuenta de una estimación de pérdida por inundación de campos cultivados con soja que rondarían los u$s1.200 millones.

Por ello y para facilitar la atención de casos de emergencia y desastre agropecuario en las zonas inundadas, desde el ruralismo se indicó que el fondo de emergencia establecido por ley, que cuenta con un presupuesto de $500 millones, está desactualizado, hecho que -tal como se admite en el Ministerio de Agroindustria- se tendrá que rever a través del Congreso Nacional.

Desde el ámbito oficial y tras las tratativas realizadas hasta el momento para evaluar prioridades de asistencia a productores inundados, el Ministerio de Agroindustria dispuso liberar por ahora sólo $130 millones, pese a que se reconocen que las pérdidas resultan “tremendas”.

Según fuentes del ruralismo consultadas por DyN, la pérdida de campos sembrados con soja alcanzaría actualmente las 4,5 millones de hectáreas, que estarían bajo agua, y si bien la estimación aún resulta prematura, esta cifra podría trepar hasta un número de 6 millones de hectáreas productivas perdidas por las lluvias en la Pampa Húmeda y el Litoral.

Al respecto, el subsecretario de Coordinación Política de la cartera agroindustrial, Hugo Rossi, explicó a la prensa que desde febrero pasado rige la declaración de emergencia nacional, independientemente de que existen actualmente nueve provincias declaradas en estado de emergencia.

A este listado se le sumarán la próxima semana Córdoba, Chaco y Río Negro, y con las decisiones ya dispuestas de qué asistencia financiera debe requerir cada provincia afectada por las inundaciones a partir de la información requerida y enviada desde cada distrito.

Fuente: Supercampo.