Las lluvias costaron a los tamberos $350 millones

“Estamos en el peor momento de nuestra historia”, afirman los lecheros cordobeses. La caída en la producción es de 40 por ciento. En tanto, las compensaciones nacionales son inferiores a $30 mil por productor,

Las lluvias de abril y mayo le costaron a la producción de la provincia más de 350 millones de pesos y los productores afirman que están “en el peor momento de su historia”: “Nadie se hace cargo y a fin de año imaginamos que 20 ó 30 por ciento de quienes se dedican a esta actividad no lo hará más”, advierten.

El viernes pasado los productores tamberos más chicos, que son beneficiarios de un subsidio del Gobierno nacional de 50 centavos por litro de leche producido, recibieron en sus cuentas bancarias la última transferencia prometida. “Son centavos y, si bien es un aliciente, no resuelve para nada la situación”, afirma Diego Manavella, secretario de la Cámara de Productores Lecheros de Córdoba (Caprolec).

Es que una suerte de tormenta perfecta cayó sobre el sector lechero: sufrieron las mayores lluvias de los últimos 40 años; la eliminación de retenciones al maíz y la soja les disparó el esquema de costos y el Estado nacional se retiró de la regulación de precios en la actividad.

Responsabilidades
Este año, lo llovido cayó sobre lo mojado, porque el sector ya venía en una situación desesperante desde el año pasado. “Estamos recibiendo entre 3,40 y 3,60 pesos por litro de leche, lo mismo que hace un año, cuando al medio todo se disparó”, explica otro miembro de la comisión directiva de la cámara lechera. “Ya no sabemos qué hacer, porque nadie se hace cargo. Ni el Gobierno nacional, ni la Provincia. Nadie. No lo hizo el gobierno anterior, que regulaba, mucho menos este gobierno que no quiere regular nada”, reclaman casi a coro los tamberos, quienes advierten que las consecuencias de la situación actual ya están impactando en la producción y llegarán indefectiblemente a las familias argentinas tarde o temprano. Con los mayores precios, por supuesto, cuando no con desabastecimiento.

Las agotadoras lluvias de abril y mayo agravaron a límites insospechados la situación. En Caprolec manejan el dato de una caída de 23 por ciento a escala nacional en la producción de leche, pero aún más grave en Córdoba.

Aunque no hay datos finales, se habla de un derrumbe de 40 por ciento en la producción de leche correspondiente al mes de abril, sin contar las pérdidas anteriores ni las de mayo, cuando las lluvias se extendieron anegando campos, infectando vacas, arruinando el forraje y restándole calidad a la leche producida.

Si, en las últimas tres temporadas, la producción lechera de la provincia para un mes de abril se ubicó en torno de los 240-250 millones de litros y se estima una caída de 40 puntos relativos, tenemos una pérdida de entre 90 millones y 100 millones de litros de leche para las tres cuencas lecheras de toda la provincia.

A un precio de entrega de 3,50 pesos el litro, se concluye que los productores tamberos dejaron de ingresar el total de 350 millones de pesos, sólo por las pérdidas de abril.
Se trata de una cifra similar al total de los subsidios que entrega el Ministerio de Agroindustria de la Nación a todos los tamberos del país, en el marco del Régimen Nacional de Compensaciones para Productores Tamberos.

Este programa distribuyó entre 6.300 tamberos argentinos casi 157 millones de pesos, para paliar la situación del pequeño productor.

Durante junio, esperan transferir 161 millones de pesos, aunque los fondos estarían llegando sobre los últimos días del mes.

En Córdoba, son 2.622 tambos los que recibieron el beneficio, contra 3.238 de la vecina provincia de Santa Fe. Cada uno de los productores cordobeses recibió un promedio de 28 mil pesos de compensación. Para este mes, la compensación promedio se ubicará en 29.400 pesos por productor.

Precio injusto
De todos modos, la compensación que corresponde al sector no es la estatal sino la del mercado. Y con un mercado concentrado, en el que los jugadores principales ejecutan su poder de fijación de precios, la consecuencia es la distorsión extrema de precios.

Mientras el productor recibe 3,50 pesos por litro, la leche envasada en el supermercado se comercializa en torno de los 18 pesos el litro, más de cinco veces el precio de la leche cruda.

La ausencia de un precio de referencia justo expulsa a productores tanto como las condiciones climáticas de los últimos meses. Los que se quedan en la actividad buscan ahora estructurar consignatarias cooperativas por cuenca, que les permitan lograr volumen y así, poder de negociación frente a la industria.

Los primeros avances en este sentido se están dando en la provincia de Santa Fe, con fuerte impulso del gobierno de esa provincia. En Córdoba, no se registran avances por el momento.

Mientras, lentamente el Gobierno nacional está comenzando a reaccionar, ordenando la normativa que regula la actividad.

Este viernes, Agroindustria estableció por primera vez parámetros sobre la Leche de Referencia y los publicó. Estos guarismos sobre contenido de materia grasa, proteínas, células somáticas y bacterias totales, entre otros ítemes, protege a los productores antes arbitrariedades de la industria. A lo que se suma la creación del Observatorio Lácteo, otro reclamo de la producción.

fuente: Comercio y Justicia