Tras la sequía, productores necesitan financiar un 80% de la Campaña Fina.

El financiamiento para la nueva campaña aparece imprescindible después de la seca que provocó pérdidas en el campo. Unos US$ 8.000 millones deberán financiarse con crédito bancario o crédito comercial.

siembra-de-trigo mundoagrocba 394587h93844u180517

Desde la Bolsa de Comercio de Rosario estimaron que para la nueva campaña agrícola, el sector invertirá algo más de US$ 10.000 millones: «La proporción a cubrir con fondos propios del sector productivo caería en relación a campañas pasadas frente al rojo que dejó la campaña 2017/18 en sus cuentas», explicaron desde la BCR.

Así, se estima que sólo un 20% o US$ 2.020 millones se cubrirán con recursos propios en tanto que US$ 8.000 millones deberán financiarse con crédito bancario o crédito comercial.

De estas últimas dos vías, el crédito bancario representaría cerca del 40% del financiamiento de terceros por US$ 3.100 millones, los cuales se reparten entre asistencias vía tarjetas agro, créditos en dólares a partir de instrumentos forwards cedidos, descuentos de valores y otras líneas de préstamos.

El crédito comercial, por su parte, provendría mayormente de corredores, acopios y cooperativas, por un lado, y proveedores de insumos y traders, por el otro.

Es importante destacar que la estimación de la BCR computa solamente el financiamiento de los seis cultivos principales (soja, maíz, trigo, sorgo, girasol y cebada): «Si consideramos el resto de los cultivos industriales y otras actividades agrícolas-ganaderas, el financiamiento bancario podría situarse por encima de los US$ 5.000 en esta campaña«.

CREA analizó la evolución desde 2015: «El stock de crédito al agro continuó, medido en dólares, evolucionando favorablemente en el arranque de 2018, creciendo 20,6% en el primer trimestre de 2018 en relación al primer trimestre de 2017, incluso pese a la licuación de las deudas en pesos producto de la devaluación de la moneda«.

Así, como puede verse en el siguiente gráfico, el agro actualmente recuperó los niveles de endeudamiento vigentes en 2013, luego de un proceso de reducción de los niveles de deuda que tocó su piso en el primer trimestre de 2016.

En relación al resto de las actividades privadas, desde el cambio de Gobierno, el sector agropecuario mostró un crecimiento algo mayor de su endeudamiento (22% vs 13,9%): «Esto probablemente asociado a un mayor acceso al financiamiento en dólares, que se muestra como el segmento más dinámico de la oferta de crédito», explicaron desde CREA.

Desagregando la evolución del stock total de crédito según si se trata de financiamiento en crédito o en dólares, destaca la fuerte preferencia desde inicios de 2016 por préstamos en moneda extranjera. En efecto, el stock de estos créditos aumentó 844%, incluso superando los niveles previos a la instauración del cepo cambiario.

El stock crédito en pesos, medido en dólares, muestra el comportamiento contrario y de hechocayó 14% desde el cambio de Gobierno. «El 16,2% de la deuda del agro paso a estar nominada en dólares en el primer trimestre de 2018, su máximo desde la salida de la convertibilidad, cuando en el último trimestre de 2015 solo el 3,9% de la deuda total se encontraba en esta moneda«.

Fuente: Agrofy News