Bayer y Nitragin unidos detrás de la última tecnología en maíz

Los nuevos híbridos de Dekalb, semillera perteneciente al grupo alemán, llegan al mercado tratados con JumpStart, un inoculante desarrollado por la marca danesa.  La combinación entre genética y biología de última generación promueve una mayor disponibilidad de nutrientes, que estimula el desarrollo de las raíces de las plantas y potencia los rendimientos.

El inoculante JumpStart, desarrollado por Novozymes para su marca Nitragin, debutará en la próxima campaña maicera de la mano de Dekalb, la semillera del grupo Bayer, con los nuevos híbridos que está introduciendo este año en el mercado argentino.

El JumpStart está formulado a base de Penicillium bilaiae, un hongo natural del suelo que crece y se extiende a lo largo de las raíces de las plantas. Este microorganismo tiene la particularidad de liberar un ácido orgánico que solubiliza minerales y residuos orgánicos presentes en el entorno de las raíces, facilitando la incorporación de nutrientes, entre estos el fósforo. Al ser un macronutriente, el fósforo es esencial para el crecimiento vegetal y su mayor disponibilidad se traduce en un veloz crecimiento radicular, un vigor anticipado de las plantas, un incremento en la tolerancia al estrés y altos rindes.

“La extraordinaria capacidad de investigación y desarrollo de Bayer se refleja en la calidad genética de las semillas Dekalb y éstas, al ser tratadas con el inoculante microbiano JumpStart, llevan la confiabilidad y el potencial de rendimiento del maíz a un nuevo nivel. Celebramos que, como resultado del trabajo conjunto que estamos realizando, los productores argentinos tengan mayor acceso a soluciones biológicas avanzadas para sus planteos productivos”, comentó Maximiliano D’Alessio, director comercial de Novozymes para América Latina.

El trabajo conjunto entre ambas marcas no es nuevo. En el año 2016 Dekalb ya había presentado un híbrido tratado con otra innovación biológica de Nitragin, el LCO, que tuvo una gran aceptación por sus excelentes resultados a campo.

Además de sus ventajas productivas, JumpStart se destaca por sus beneficios para el medio ambiente. En este sentido, cabe destacar que el mayor desarrollo radicular que promueve en las plantas se convierte también en una potente fuente de captura y almacenamiento de carbono en el suelo. Por otra parte, al aumentar su capacidad de absorción de nutrientes, reduce las pérdidas de nitrógeno por lavado o hacia la atmosfera.