Bolsa Cereales de Córdoba: Estimación de Cosecha con bajas para Trigo.

Un informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba sobre producción de cultivos invernales destaca una caída en la producción de Trigo y Garbanzo respecto a la campaña anterior. También muestra un avance en la siembra de Soja y Maíz en el inicio de la campaña de cultivos estivales en toda la provincia.

EL INFORME

Trigo. La segunda estimación de producción para la campaña 18/19 arroja un valor de 3,36 millones de tn, un 24% inferior a la campaña pasada. El 96% de las 1.441.600 ha sembradas con trigo en la provincia de Córdoba ya han superado su periodo crítico, atravesando los estadíos “grano lechoso” en un 60% y “grano pastoso” en un 36%. El estado general es de bueno a excelente en el 66% de los lotes.
Garbanzo. Para la segunda estimación de producción, la misma sería de 67.900 tn, un 6% más que la campaña pasada (17/18). De las 49.700 ha sembradas, el 71% muestra una condición de buena a excelente siendo el estado fenológico predominante “Máximo tamaño de semillas” en el 52% de los lotes.
Estivales. Se ha completado el avance de siembra de maíz temprano en la provincia de Córdoba, lo cual representa el 32% respecto al área total a sembrarse. En soja, se está iniciando la labor, con un avance inferior al 1%.

Producción de Trigo en Córdoba (Campaña 2018/19)

La segunda estimación de producción para la campaña 2018/19 de trigo proyecta un valor de 3,36 millones de toneladas, un 24% inferior a lo obtenido la campaña anterior, aunque la cuarta mayor de los últimos 10 años. El rendimiento promedio provincial ponderado es de 25 qq/ha, también mostrando una variación negativa del 25%. El rendimiento en secano se estima en 24,9 qq/ha, siendo los departamentos Totoral y Tulumba los que presentan menores rindes estimados, de 10 qq/ha y 16 qq/ha respectivamente, mientras que los mayores rendimientos estimados en secano se darían en Pte. Roque Sáenz Peña con 31,6 qq/ha y Marcos Juárez con 29,8 qq/ha. Bajo riego, el rendimiento promedio estimado para la provincia es de 35,2 qq/ha.

La superficie de trigo con destino a cobertura en la presente campaña (18/19) representa un 5% del total, es decir unas 69.500 ha, encontrándose en mayor proporción en los departamentos Juárez Celman, Río Cuarto, Río Seco y Tercero Arriba. Según lo reportado por la Red de Colaboradores, una proporción de lotes originalmente destinados a cobertura se dejaron para trilla debido a las aceptables condiciones que presentaban. Respecto a la superficie perdida hasta la primera quincena de noviembre, se estima que es el 2% de la superficie sembrada, unas 29.700 ha, siendo las causas principales el granizo, la sequía y las heladas.
Fenológicamente, en la provincia de Córdoba de las 1.441.600 ha sembradas, solo el 4% del trigo aún continúa en “antesis”, atravesando el período crítico de definición de rendimiento, mientras que los más avanzados ya se encuentran llenando sus granos, en los estadíos “grano lechoso” y “grano pastoso” en un 60% y 36% respectivamente.
El estado general del cultivo es muy similar a la quincena pasada, encontrándose un 5% de los trigos en condiciones excelentes, un 17% muy buena y un 44% en condiciones buenas, mientras que el restante 34% se presenta en estados malos a regulares. Lo ocurrido en la presente quincena podría ser decisivo en cuanto a rendimiento y calidad, debido a que las precipitaciones acontecidas durante estas etapas podrían ocasionar enfermedades, vuelcos, brotación de granos y perdidas de calidad, puntos que será relevados posteriormente.

Respecto al estado sanitario, la Red de Colaboradores del D.I.A ha reportado casos de Isoca de la espiga (Faronta albilinea) en baja incidencia en los departamentos Río Primero, Río Segundo y San Justo, pudiendo producir el corte de la espiga y en consecuencia grandes pérdidas. En Río Primero, se vieron los primeros casos de Chinche verde (Nezara viridula) en baja incidencia lo que, a estas alturas del ciclo, podría ocasionar disminución del peso de grano o perdidas en calidad. Luego, en Totoral aún se siguen reportando lotes con baja incidencia de Pulgón verde (Schizaphis graminum).
En cuanto a enfermedades, en los departamentos General Roca, Juárez Celman, Marcos Juárez, Río Cuarto, Río segundo, San Justo y Santa María se detectaron lotes con Mancha Amarilla (Drechslera tritici- repentis), y Roya Amarilla (Puccinia spp.) en baja incidencia y severidad. Como así también en Unión, Tercero Arriba y Marcos Juárez Roya Anaranjada (Puccinia recondita). A su vez, en Pte. Roque Sáenz Peña se reportó Bacteriosis (Xanthomonas campestris), en San Justo Septoriosis (Septoria tritici), Fusariosis (Fusarium graminearum) en San Javier, que conlleva la aparición de granos chuzos y Carbón volador (Ustilago tritici) en Río Primero y Marcos Juárez, todos estos en baja incidencia y severidad.

GARBANZO

A la primera quincena de noviembre, se estima que las perdidas de superficie de Garbanzo alcanzan el 6% (3.200 ha) del total sembrado, siendo las principales causas el granizo y las enfermedades como Fusarium (Fusarium spp.) y Rhizoctonia (Rhizoctonia spp.) que han impactado fuertemente en la presente campaña. Sin embargo, la producción estimada ronda las 67.900 tn, un 6% más que la campaña pasada (17/18). A su vez, el rendimiento ponderado provincial se halla en los 14,6 qq/ha, obteniéndose 12,8 qq/ha en secano y en 24,7 qq/ha bajo riego.

Respecto al estado fenológico, el 100% de las 49.700 ha sembradas con garbanzo continúan atravesando su fase reproductiva, encontrándose fenológicamente el 32% en “Vainas con máximo tamaño”, el 16% en “Inicio de llenado” y el 52% en “Máximo tamaño de semillas”.
En cuanto a su estado general, el garbanzo se presenta en un 34% de los lotes con estados Excelentes a Muy buenos, 37% en estados Buenos, mientras que el 29% restante se encuentra en condiciones que van de Regulares a Malas, principalmente afectados por falta de agua y enfermedades causadas por hongos del suelo que han afectado con variada intensidad a la leguminosa. Respecto a la quincena pasada, las condiciones son similares y al igual que trigo se espera que las precipitaciones registradas no tengan un efecto negativo sobre el cultivo, situación que podría darse si continúan las lluvias y se predisponen las condiciones para la aparición de enfermedades y pérdida de calidad.

Fuente: Bolsa de Cereales de Córdoba