Bolsa de Buenos Aires proyecta menor producción de Soja para campaña 2019/20.

La cosecha de soja en la nueva campaña registraría una caída superior a los 4 millones de toneladas más allá de la mayor superficie.

En la primera estimación de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, se destacó la importante caída en la cosecha de soja contra la campaña anterior pese a la mayor superficie sembrada.

La entidad porteña proyecta una caída de 4,1 millones de toneladas en el nuevo ciclo 2019/20, alcanzando una producción total de 51 millones de toneladas, pese a que el área avanzaría en 200 mil hectáreas a 17,6 millones.

En este sentido, Esteban Copati, Jefe de Estimaciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, explicó que hay distintos factores que van a afectar el rendimiento promedio.

En primer lugar, «hay una mayor participación de siembras de segunda, que tienen menor potencial de rendimiento». Se estima que un 33% de la superficie será de soja de segunda, lo que genera una presión negativa sobre el rinde promedio.

Cuando se alcanzó el anterior récord en la campaña 2014/15 de soja (60,8 millones de toneladas), la cantidad de cuadros de segunda en los planteos de la oleaginosa era del 20%.

Además, «pese al buen escenario climático, es muy difícil lograr el récord de productividad que hemos registrado durante la campaña pasada«.

Copati agregó que todavía «hay que ver cómo avanza el clima durante la ventana de siembra y hay que tener más claridad sobre el escenario económico». Bajo este escenario, «no nos animamos a proyectar por el momento mejores productividades».

Milagros Ibarguren, economista de la entidad porteña, destacó que para esta campaña «los precios vienen bastante por abajo de la campaña anterior».

En el contexto actual, la soja pasó a ganarle al maíz, dado que requiere una inversión menor y en un planteo más defensivo la oleaginosa gana terreno.

El resultado de las PASO y el impacto negativo de los datos del USDA configuraron un escenario negativo para el maíz, que «hasta medidos de agosto presentaba muy buenas perspectivas».

En el caso del maíz, de una campaña a otra la variación de costos fue de US$ 525 por hectárea a US$ 538 en la zona núcleo. Por otro lado, en soja los costos pasaron de US$ 238 a US$ 245.

Además, los productores no saben cuál va a ser el esquema de retenciones: «Hay un rumor de que la alícuota suba, y eso agrega incertidumbre al planteo«.