En el país: casi un cuarto de quienes dejan la carne vacuna lo hacen por cuestiones de salud y maltrato animal

Si bien la cuestión económica y, en especial, la pérdida del poder adquisitivo de la gente es el factor determinante en el abandono del consumo de carne vacuna, un 24% de quienes lo hacen es por cuestiones asociadas a salud y el maltrato animal.

El dato surge de una encuesta realizada por Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (Ipcva) de un muestreo de 1100 casos que realiza el ente cada dos meses.

Vale recordar que, según un informe de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra), la carne vacuna aumentó un 4,9% en el primer mes de 2021, en tanto volvió a descender el consumo (en enero último se ubicó en 49,2 kg/año), que se mantiene entre los niveles más bajos en 100 años.

Para Adrián Bifaretti, jefe de Promoción Interna del Ipcva, ante los resultados los desafíos hacia adelante pasan por no polemizar. En rigor, se pregunta cuál debería ser la estrategia de marketing o de comunicación y de promoción de carne, no solo vacuna sino también de las otras carnes.

«Es totalmente desaconsejado polarizar con aquellos que adoptan una cultura alimentaria más extrema. Se debe trabajar para construir valores sobre la carne vacuna que los tiene y mucho», señaló en la jornada virtual a campo «El NEA hacia la intensificación ganadera», en Reconquista, Santa Fe.

Para el experto, la cuestión institucional vinculada a los valores y la identidad de quién produce el alimento es crucial. «Trabajar con responsabilidad social empresaria, cómo se está cuidando a la gente con los protocolos, a luchar contra el Covid, mejorar las cuestiones de bienestar animal. Cómo se produce el producto, qué características tiene, qué es lo que puede ofrecer desde el punto de vista nutricional o desde la salud, nuevos cortes cárnicos», detalló.

«Es un cambio más profundo a la elección de un alimento u otro. No están hablando de una elección sino de un cambio en el estilo de vida. Estamos asistiendo a un cambio en los hábitos de compra, hábitos de consumo de carnes en nuestro país, donde obviamente hay un mayor porcentaje de la población que está buscando opciones alimentarias asociadas a nuevas conductas», agregó.

Para el organismo, otro punto a destacar es el comportamiento y reacción de la gente con respecto a las redes sociales. Del relevamiento surgió que un 70% de la gente estaría dispuesta a sustituir la carne si ve noticias asociadas al precio.

En el estudio aparece también que casi un 30% de las personas, cuando ve alguna noticia relacionada con el maltrato animal, tiene la idea de sustituir la carne y un 20% cuando aparece información vinculada a la salud o al posible o hipotético daño al ambiente.

Según Bifaretti, en el actual escenario, a la acción de activistas en redes sociales contra la carne vacuna se suman las celebridades: «Empieza a darse también hasta una politización del tema. Entonces el activismo tanto vegano como ambiental va a seguir creciendo en el futuro».

En este sentido, el experto en carne vacuna sostiene que esa posición extrema de los veganos, que fomentan la grieta alimentaria, debería ser enfrentada estratégicamente, achicándola. «La carne, todos los alimentos en realidad, deben unir a las personas y no separarlas más allá de su forma de ver o su estilo de vida. La comida no debe separarnos sino unirnos», concluyó.

LA NACION / CAMPO