ESTUDIANTES CREARON UN SISTEMA INALÁMBRICOPARA MONITOREAR EL ESTADO DE SILOBOLSAS

Mide la concentración de dióxido de carbono (CO2) presente en las silobolsas y lo reporta en tiempo real y en forma gráfica a la pantalla de la computadora 

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«Encanutar» soja hasta que su precio en dólares alcance la estratósfera será menos riesgoso gracias a un dispositivo de monitoreo inalámbrico desarrollado por estudiantes del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA). Se trata de un sistema que mide la concentración de dióxido de carbono (CO2) presente en las silobolsas, lo reporta en tiempo real y en forma gráfica a la pantalla de la computadora. De esta manera, los productores pueden evaluar el estado de la soja guardada en las silobolsas y decidir cuándo venderla antes de que se eche a perder. 

Este fue uno de los proyectos presentados en la Feria de Electrónica y Eléctrica del ITBA que se desarrolló el 19 y 20 de septiembre, en el marco de la Semana del Emprendedor Tecnológico que terminó el lunes 22, organizada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.

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“En diez silobolsas el productor tiene $ 5 millones guardados (2000 toneladas, al precio actual de la soja Rosario). Por menos del 1 por ciento de ese valor, ofrecemos un sistema que le permite monitorear el estado de su producción y decidir en qué momento venderla”, sostiene Alejandro Piñeiro, flamante ingeniero electrónico, quien desarrolló el proyecto junto a Marino Giacoboni y Matías Pretel Las soluciones importadas de monitoreo tienen un valor de 4.000 euros por silobolsa”, aclara.  “Elegimos la medición de CO2 porque es un indicador más estable a lo largo del día que la temperatura o humedad”, cuenta. Los medidores se colocan cada 10 metros y no requieren que una persona se encargue de abrir la silobolsa para efectuar la medición.

Los emprendedores desarrollaron el sistema como tesis de final de su carrera. Para financiar el proyecto obtuvieron ayuda der la compañía Bonus Comunicaciones SRL, fundada por el padre de Alejandro. Para armar los sensores de CO2 reutilizaron cajas de tarifadores de locutorios fabricados por esta pyme familiar. El equipo está realizando pruebas con el prototipo a campo abierto y espera lanzar comercialmente el producto en breve.