Ganadería: acciones para combatir la plaga de mosquitos en el norte

Se realizan pulverizaciones aéreas sobre zonas de los departamentos Tulumba y Río Seco. Actúan los ministerios de Agricultura y Ganadería, de Gobierno y de Salud.

A raíz de la proliferación de mosquitos que afecta a zonas de los departamentos Tulumba y Río Seco, en el norte provincial, se están coordinando acciones entre los ministerios de Agricultura y Ganadería, de Salud y de Gobierno para el combate de esta plaga. Luego de relevar las áreas afectadas, se dispuso el envío de aeronaves para la pulverización aérea en zonas específicas, y también la entrega de larvicidas en las poblaciones de las inmediaciones.

Desde la semana pasada, personal de las tres carteras mencionadas se encuentra trabajando en la zona. En primer término, en lo que corresponde a las áreas rurales, el día viernes un avión realizó un vuelo de aplicación de cipermetrina, el producto que se utiliza en este tipo de casos, en tanto que ayer jueves una segunda aeronave sobrevoló la región para hacer lo propio. El envío de las avionetas fue coordinado por las carteras agropecuaria y de Gobierno, y la cipermetrina fue provista por el programa de Zoonosis que depende del área de Epidemiología del Ministerio de Salud provincial.

Además, desde esta última dependencia sanitaria se llevó a cabo una tarea de control de los mosquitos en las zonas urbanas, también con aplicación de productos para el combate de la plaga; completando el cronograma de tareas, otra de las acciones fue la distribución de repelentes y larvicidas entre los pobladores. El primer ciclo se realizó el sábado pasado, el martes fue el segundo y el sábado entrante se ejecutará el tercero.

Las zonas sobre las que se está realizando la cobertura incluyen las localidades y parajes de Rosario del Saladillo, La Rinconada, Campo Alegre, Pozo Hondo e Isla Verde.

Olden Riberi, secretario de Ganadería de la cartera productiva, se encuentra en permanente contacto con los pilotos que están a cargo de las aplicaciones, y trabaja en conjunto con el secretario de Gestión de Riesgo Climático y Catástrofes, Claudio Vignetta, y con la responsable de Epidemiología, Laura López.

“Se trata de un fenómeno inusual, que se desarrolló producto de tres factores que se unieron: temperaturas un tanto elevadas para la ápoca, alto porcentaje de humedad debido a la acumulación de agua en algunas zonas por los excesos hídricos, y pastizales crecidos. El ciclo de este insecto es de aproximadamente unos cuatro días, de manera que más allá de las aplicaciones que estamos realizando, vamos a seguir monitoreando la situación en las próximas jornadas”, manifestó Riberi, secretario de Ganadería.