La desesperada carta de una productora inundada a Macri: «Somos invisibles, luego de haber sido despreciados»

Liliana Broda tiene 56 años y una vida como chacarera en Córdoba; su campo lleva tres años anegado y pide ayuda urgente; «Acompañenos en nuestro vía crucis», clama

«Lejos de las capitales, estamos olvidados por la Nación y por la Provincia. de Córdoba. Estamos con el agua al cuello, sin caminos, sin rutas, sin presente y sin futuro. Somos invisibles, luego de haber sido exprimidos y despreciados».

La carta es de Liliana Broda, 56 años, dos hijos, una mamá de 90 años y toda una vida como chacarera en el departamento Marcos Juárez, en el sudeste cordobés, en el límite con Santa Fe. Su campo -como todos en la zona- está anegados hace más de tres años.

«Todo se trata del desastre hídrico que nos dejó a nuestra suerte por el ‘problemita’ de la maldita obra pública -sigue la carta que Broda envió a Alfredo Leuco, de Radio Mitre y a LA NACION-. Le ruego de rodillas: denos una mano por favor difundiendo nuestro vía crucis».

La desesperación de esta productora agrícola y ganadera de la localidad de Cavanagh (sobre la ruta provincial 12, a 340 kilómetros de la capital provincial) es compartida por todos los habitantes de la región que tienen su vida cotidiana hace tres años.

Hace una semana encontraron el cadáver de Leonardo Formento, de 39 años, en la laguna La Blanqueada, donde era buscado desde hace 10 días. Es que el agua cubre la ruta hace meses y obliga a cruzar por carretón. No lo hizo porque la atravesó de madrugada en su Chevrolet Celta. Falleció ahogado.

En diálogo con LA NACION, Broda se emocionó al admitir que piensa dejar su campo y el país. «Lo empezó mi padre que falleció cuando yo tenía siete años; con mi madre hicimos lo que pudimos y a los 35 años me dediqué totalmente y lo saqué adelante -continúa-. Ahora creo que me iré a otro país, dejaré todo».

Participa de todas las reuniones vecinales y hace gestiones en todas las oficinas públicas nacionales y provinciales buscando una salida. Después de más de 30 meses anegados, tienen en claro que la explicación no pasa ni por las lluvias más abundantes ni por el manejo de las tierras, hay un problema básico de infraestructura.

Broda le envió una carta al presidente Mauricio Macri y se reunió con el ministro de Agricultura, Ricardo Buryaile quien convocó al secretario cordobés Néstor Roulet para que ratificara el relato de la productora. «Le dio los datos técnicos que muestran la verdad de lo que planteamos», sintetiza la mujer.

De nuevo hubo promesas de partidas para arreglar caminos para que pueda moverse la producción y pedidos de que la Intendencia realice las gestiones para que lleguen los recursos.

La desesperación de los vecinos -no sólo de los productores- crece con el paso del tiempo. Hacer los 35 kilómetros que separan a Cavanagh a Corral de Bustos es imposible; hay que transitar más de 200 para ir por Santa Fe. Ni al médico pueden ir los habitantes del lugar. «Han venido muchos, hablan, aseguran que habrá soluciones y nada -sigue Broda-. Se hicieron canales chicos que empeoraron todo porque la tierra se rayó y como las napas están altas, el agua sube más rápido».