La zona intenta regresar a la normalidad, aunque con severos daños para reconstruir

  • Entre las que se cayeron y las que quedaron inhabitables, entre las dos tormentas hubo más de 15 viviendas que habrá que construir en nuevos terrenos y en ubicaciones diferentes a las actuales.
  • El municipio decidió acompañar el momento que viven esas familias absorbiendo el costo del alquiler de una nueva vivienda.
  • En el primer temporal, los más afectados habían sido Quintas de Santa Elena, La Cotita, y Agua Mansa, Esta vez, los mayores daños se registraron en la Estancia Agua Mansa, el barrio Agua Mansa, y los barrios La Costanera y Las Vertientes. El municipio de Jesús Maria espera auxilio financiero nacional y provincial para hacer frente a la enorme erogación que será necesaria para afrontar los daños. Mientras, se declaró en emergencia.
  • Las actividades culturales, festivas y por el Día de la Mujer fueron suspendidas o reprogramadas.

Las autoridades de esta ciudad vienen trabajando en una serie de acciones para paliar los efectos desastrosos que la inusual crecida del río generó en barrios y en vecinos. La medida más concreta fue absorber los gastos de alquiler de unas 15 familias que perdieron su vivienda o que quedaron inhabitables por la peligrosa cercanía con el río. Aunque no se habló de plazos, se estima cuando menos unos seis meses.
En el mientras tanto, el intendente Gabriel Frizza les informó a esos vecinos que comprometió ayuda del gobierno provincial para unos diez kits de viviendas y que gestionará tantos cuantos sean necesarios. El mayor problema, por la escasez de disponible, es encontrar los terrenos donde construir las nuevas unidades habitacionales.

Reunidos con representantes de cada uno de los centros vecinales de los barrios afectados por los desbordes del Río Guanusacate, las autoridades hicieron variados anuncios para lo inmediato y lo mediato en la remediación de los destrozos. Allí, se contó que técnicos del Instituto Nacional del Agua (INA), encabezados por el geólogo Osvaldo Barbeito, estuvieron recorriendo todo el trayecto del río Guanusacate para realizar un diagnóstico, que se cruzarán con los estudios que realizó el ingeniero agrónomo especialista en conservación de suelos, David Torre, de modo de poder definir proyectos concretos. El proyecto de Torre preveía construir alrededor de 100 microembalses de retardo a lo largo de toda la cuenca del río, aunque de ese total hasta ahora se construyó una décima parte.

El jefe comunal confirmó que también hay negociaciones abiertas con una empresa minera de San Juan, para contratar maquinaria de gran porte que vuelque material al río y así recuperar márgenes. La expectativa pasa también por conseguir piedras de gran tamaño, que no se están consiguiendo en las canteras de la zona. Este fin de semana, estarán en la ciudad enviados de esa empresa para hacer un diagnóstico y definir la factibilidad de ese aporte.

Datos sueltos. 

  • A la fecha están trabajando en el río 12 volcadores, 3 excavadoras, una retropala, 5 cargadores frontales, y dos topadoras. Al mismo tiempo, se está trayendo material de 3 canteras diferentes: Zerboni, Parodi y Sociedad Rural.

Prioridad. Se trabaja de manera más urgente en zonas donde la ribera ha quedado muy cerca de viviendas. Concretamente en barrios Las Vertientes, dos sectores de La Costanera, Agua Mansa, Los Naranjos, y también en Camino a Los Molles (en este caso por el impacto que podría generar el ingreso de agua del Río Carnero a Sierras y Parques). Inclusive hay zonas, como sectores de La Cotita, donde la situación del río todavía no ha permitido ninguna intervención.

  • Entre las que se cayeron y las que quedaron inhabitables, entre las dos tormentas hubo más de 15 viviendas que habrá que construir en nuevos terrenos y en ubicaciones diferentes a las actuales.
  • El municipio decidió acompañar el momento que viven esas familias absorbiendo el costo del alquiler de una nueva vivienda.
  • En el primer temporal, los más afectados habían sido Quintas de Santa Elena, La Cotita, y Agua Mansa, Esta vez, los mayores daños se registraron en la Estancia Agua Mansa, el barrio Agua Mansa, y los barrios La Costanera y Las Vertientes. El municipio de Jesús Maria espera auxilio financiero nacional y provincial para hacer frente a la enorme erogación que será necesaria para afrontar los daños. Mientras, se declaró en emergencia.
  • Las actividades culturales, festivas y por el Día de la Mujer fueron suspendidas o reprogramadas.

Las autoridades de esta ciudad vienen trabajando en una serie de acciones para paliar los efectos desastrosos que la inusual crecida del río generó en barrios y en vecinos. La medida más concreta fue absorber los gastos de alquiler de unas 15 familias que perdieron su vivienda o que quedaron inhabitables por la peligrosa cercanía con el río. Aunque no se habló de plazos, se estima cuando menos unos seis meses.
En el mientras tanto, el intendente Gabriel Frizza les informó a esos vecinos que comprometió ayuda del gobierno provincial para unos diez kits de viviendas y que gestionará tantos cuantos sean necesarios. El mayor problema, por la escasez de disponible, es encontrar los terrenos donde construir las nuevas unidades habitacionales.

Reunidos con representantes de cada uno de los centros vecinales de los barrios afectados por los desbordes del Río Guanusacate, las autoridades hicieron variados anuncios para lo inmediato y lo mediato en la remediación de los destrozos. Allí, se contó que técnicos del Instituto Nacional del Agua (INA), encabezados por el geólogo Osvaldo Barbeito, estuvieron recorriendo todo el trayecto del río Guanusacate para realizar un diagnóstico, que se cruzarán con los estudios que realizó el ingeniero agrónomo especialista en conservación de suelos, David Torre, de modo de poder definir proyectos concretos. El proyecto de Torre preveía construir alrededor de 100 microembalses de retardo a lo largo de toda la cuenca del río, aunque de ese total hasta ahora se construyó una décima parte.

El jefe comunal confirmó que también hay negociaciones abiertas con una empresa minera de San Juan, para contratar maquinaria de gran porte que vuelque material al río y así recuperar márgenes. La expectativa pasa también por conseguir piedras de gran tamaño, que no se están consiguiendo en las canteras de la zona. Este fin de semana, estarán en la ciudad enviados de esa empresa para hacer un diagnóstico y definir la factibilidad de ese aporte.

Datos sueltos. 

  • A la fecha están trabajando en el río 12 volcadores, 3 excavadoras, una retropala, 5 cargadores frontales, y dos topadoras. Al mismo tiempo, se está trayendo material de 3 canteras diferentes: Zerboni, Parodi y Sociedad Rural.
  • Prioridad. Se trabaja de manera más urgente en zonas donde la ribera ha quedado muy cerca de viviendas. Concretamente en barrios Las Vertientes, dos sectores de La Costanera, Agua Mansa, Los Naranjos, y también en Camino a Los Molles (en este caso por el impacto que podría generar el ingreso de agua del Río Carnero a Sierras y Parques). Inclusive hay zonas, como sectores de La Cotita, donde la situación del río todavía no ha permitido ninguna intervención.

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  • Entre las que se cayeron y las que quedaron inhabitables, entre las dos tormentas hubo más de 15 viviendas que habrá que construir en nuevos terrenos y en ubicaciones diferentes a las actuales.
  • El municipio decidió acompañar el momento que viven esas familias absorbiendo el costo del alquiler de una nueva vivienda.
  • En el primer temporal, los más afectados habían sido Quintas de Santa Elena, La Cotita, y Agua Mansa, Esta vez, los mayores daños se registraron en la Estancia Agua Mansa, el barrio Agua Mansa, y los barrios La Costanera y Las Vertientes. El municipio de Jesús Maria espera auxilio financiero nacional y provincial para hacer frente a la enorme erogación que será necesaria para afrontar los daños. Mientras, se declaró en emergencia.
  • Las actividades culturales, festivas y por el Día de la Mujer fueron suspendidas o reprogramadas.

Las autoridades de esta ciudad vienen trabajando en una serie de acciones para paliar los efectos desastrosos que la inusual crecida del río generó en barrios y en vecinos. La medida más concreta fue absorber los gastos de alquiler de unas 15 familias que perdieron su vivienda o que quedaron inhabitables por la peligrosa cercanía con el río. Aunque no se habló de plazos, se estima cuando menos unos seis meses.
En el mientras tanto, el intendente Gabriel Frizza les informó a esos vecinos que comprometió ayuda del gobierno provincial para unos diez kits de viviendas y que gestionará tantos cuantos sean necesarios. El mayor problema, por la escasez de disponible, es encontrar los terrenos donde construir las nuevas unidades habitacionales.

Reunidos con representantes de cada uno de los centros vecinales de los barrios afectados por los desbordes del Río Guanusacate, las autoridades hicieron variados anuncios para lo inmediato y lo mediato en la remediación de los destrozos. Allí, se contó que técnicos del Instituto Nacional del Agua (INA), encabezados por el geólogo Osvaldo Barbeito, estuvieron recorriendo todo el trayecto del río Guanusacate para realizar un diagnóstico, que se cruzarán con los estudios que realizó el ingeniero agrónomo especialista en conservación de suelos, David Torre, de modo de poder definir proyectos concretos. El proyecto de Torre preveía construir alrededor de 100 microembalses de retardo a lo largo de toda la cuenca del río, aunque de ese total hasta ahora se construyó una décima parte.

El jefe comunal confirmó que también hay negociaciones abiertas con una empresa minera de San Juan, para contratar maquinaria de gran porte que vuelque material al río y así recuperar márgenes. La expectativa pasa también por conseguir piedras de gran tamaño, que no se están consiguiendo en las canteras de la zona. Este fin de semana, estarán en la ciudad enviados de esa empresa para hacer un diagnóstico y definir la factibilidad de ese aporte.

Datos sueltos. 

  • A la fecha están trabajando en el río 12 volcadores, 3 excavadoras, una retropala, 5 cargadores frontales, y dos topadoras. Al mismo tiempo, se está trayendo material de 3 canteras diferentes: Zerboni, Parodi y Sociedad Rural.
  • Prioridad. Se trabaja de manera más urgente en zonas donde la ribera ha quedado muy cerca de viviendas. Concretamente en barrios Las Vertientes, dos sectores de La Costanera, Agua Mansa, Los Naranjos, y también en Camino a Los Molles (en este caso por el impacto que podría generar el ingreso de agua del Río Carnero a Sierras y Parques). Inclusive hay zonas, como sectores de La Cotita, donde la situación del río todavía no ha permitido ninguna intervención.

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