Maquinaria agrícola: sector estrella en crisis y decepcionado con la mesa sectorial


En 2016-2017 vivieron un repunte y se esperaba que explotaran por las medidas oficiales que beneficiaron al campo

 Pero «pasaron cosas» y hay quejas hasta por los resultados obtenidos en el ámbito de diálogo establecido con el Gobierno, que igual siguen reivindicando. Las expectativas para 2019.

MAQUINARIA AGRÍCOLA: SECTOR ESTRELLA EN CRISIS Y DECEPCIONADO CON LA MESA SECTORIAL

La fabricación y venta de maquinaria agrícola deberían haber sido las estrellas del 2018, si se tienen en cuenta las medidas que adoptó, casi desde su asunción, el Gobierno para favorecer la actividad, como la quita de retenciones a las exportaciones agropecuarias y que se tradujeron en repuntes en ambos indicadores tanto 2016 como en 2017. Por ejemplo, según un informe de IES Consultores, en 2017 las ventas de cosechadoras crecieron un 51% y las de tractores 49%, mientras que la producción local de equipos aumentó un 27%. Pero ya a comienzos de este año, se «esperaba un crecimiento más moderado», según analizó en su momento Alejandro Ovando, de IES Consultores. Esto como consecuencia de que «gran parte de los productores ya invirtieron en renovación de equipos, y finalmente la evolución del sector de maquinaria dependerá del resultado de la cosecha 2017/18, que viene complicada por razones climáticas», explicó. 

Fue peor: la facturación por venta de máquinas agrícolas durante el tercer trimestre de 2018 cayó 8,7% en relación con el mismo trimestre de 2017, según el último informe del Indec, difundido en noviembre pasado.

Según el mismo informe del ente de estadísticas, aunque los tractores y las sembradoras presentaron los niveles de facturación más altos del trimestre, su facturación por ventas representó una disminución de 9,7% y una suba de 23,9%, respectivamente, en comparación con igual trimestre del año anterior,  a lo que se le debe desagregar la inflación. El dato más exacto lo dieron, entonces, las unidades vendidas, que «en los cuatro grupos de maquinarias registraron disminuciones en el tercer trimestre de 2018, con respecto a igual período del año anterior. Las cosechadoras y tractores presentaron una disminución de 65,1% y 53,9%, respectivamente, mientras que los implementos y sembradoras registraron una baja de 35,4% y 19,2%, respectivamente, para la misma comparación»

En este contexto, la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA) hizo pública su contrariedad por la falta de soluciones que mostró el desarrollo de la Mesa de Competitividad del sector. Su presidente, Raúl Crucianelli, dijo que «la verdad es que no hemos avanzado en nada» y calificó como «una decepción» el balance de las gestiones realizadas en esa instancia.

Aunque remarcó que la entidad tiene «un buen diálogo con el gobierno nacional, lo que es lo importante a rescatar», admitió que el resultado de la Mesa «no fue bueno».

Crucianelli ponderó como «un hecho inédito e importantísimo para el sector», la formación de la Mesa de la Maquinaria Agrícola, pero se mostró decepcionado por su desarrollo. Advirtió que sirvió como «un buen momento para iniciar el diálogo con el gobierno nacional. Tuvimos mucho entusiasmo al comienzo. La primera Mesa fue con el Presidente (Mauricio Macri). Allí se establecieron submesas para ir avanzando en distintos temas», recordó Crucianelli.

La mesa sectorial fue lanzada en marzo del año que termina, en el contexto de la sequía que ya se anunciaba como una de las más duras de la historia. Su impulsor fue el por entonces ministro de Producción, Francisco Cabrera. 

Sin embargo, la cuestión de la sequía como explicación de la crisis del sector quedó relegada. En un informe a la CNV, la empresa Agrometal, afectada por la crisis, dijo que «aún teniendo en cuenta el efecto negativo de la sequía ocurrida al inicio del año y que tuvo un impacto desfavorable para el sector, a esta altura del año no caben dudas que el principal motivo para tan importante caída en el nivel de demanda es la falta de financiamiento bancario, el cual prácticamente desapareció como consecuencia de la política monetaria de suba de las tasas de interés a niveles incompatibles con cualquier actividad productiva, principalmente del sector pymes, cuyo funcionamiento depende en alta medida de las herramientas financieras que los bancos habitualmente otorgan y en el caso de este año, están ausentes o tienen un costo altísimo”.

«Lo que falta es que aparezca el crédito. La actividad industrial con tasas de este nivel no es posible. Ninguna actividad es posible con una tasa que supere el 50%», reforzó, por su parte, Crucianelli. «Hay cosas que no es que el Gobierno no las quiere hacer, sino que no las puede hacer. No estamos exceptos de lo que le pasa al país todo», expresó.
 
El de la maquinaria agrícola fue también uno de los rubros más castigados de la industria metalúrgica. Según datos relevados por la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra), en un contexto donde todos los rubros que componen el sector terminaron el mes con menor producción, «maquinaria agrícola» fue la segunda más afectada, con una merma de 12,6%.

El Indec también le asigna un peso a la maquinaria agrícola en la caída de la industria metalmecánica: en su informe con el Estimador mensual industrial de octubre, que se difundió a principios de diciembre, el ente de estadísticas sostiene que «la industria metalmecánica excluida la automotriz cae 21,3% en octubre de 2018 y 6,8% en el acumulado enero- octubre de 2018, en comparación con los mismos períodos del año anterior. El menor nivel de actividad se origina en la retracción de la demanda interna por parte de diversos sectores, principalmente de las actividades agrícolas, de los sectores de consumo durable (en particular la línea blanca) y de la actividad de la construcción. En octubre de 2018, el segmento de maquinaria agrícola presenta disminuciones principalmente en la fabricación de tractores, cosechadoras e implementos agrícolas».

Esperanzas para 2019

Las expectativas de la industria de maquinaria agrícola, ante este panorama, radican en que «aparezca un buen 2019» y que la cosecha logre altos niveles productivos.

“La cosecha récord que se proyecta para la campaña 2018-2019 plantea un escenario de buena rentabilidad y elevado volumen físico para el sector de maquinaria agrícola, aunque el repunte dependerá de la evolución de las tasas de interés del próximo año”, explicaron desde IES  Consultores.

Es lo que opina también Mariángel Ghilardi Sierra, coordinadora de Estudios Sectoriales de Ecolatina, en un artículo para El Cronista, donde dice que, en el caso del sector agrícola, con condiciones climáticas más benignas será fácil mostrar una recuperación sustancial ante el desplome sufrido en 2018 debido a la sequía que causó pérdidas millonarios. A su vez, esto traccionará sectores conexos como: maquinaria agrícola, transporte de cargas y agroquímicos, que se verán beneficiados ante una mayor cosecha gruesa».