Pasturas: la planificación y el manejo hacen la diferencia

Para producir más forraje y con mayor calidad es necesario lograr una buena siembra. Especialistas del INTA Balcarce –Buenos Aires– brindan recomendaciones para obtener mejores resultados.

Pasturas: la planificación y el manejo hacen la diferencia

El fin del verano y el principio del otoño marcan el momento ideal para la siembra de las pasturas. Es aquí cuando una correcta planificación y un buen manejo inicial serán fundamentales para lograr los mejores resultados. En este sentido, desde elINTA Balcarce–Buenos Aires– ponen el foco en las recomendaciones para obtener más pasto y de calidad.

Jorge Castaño, especialista en pasturas de esa unidad del INTA, destacó la importancia de un buen manejo  desde el inicio. “Las pasturas necesitan ser tratadas con la misma dedicación que un cultivo de cosecha porque, de esta manera, vana producirun forraje de calidad que ayudará a amortizar la inversión de la siembra”, señaló.

Según Castaño, “estamos en una época con muy buenas lluvias y humedad en el sudeste bonaerense para que los barbechos acumulen agua”.

Aunque la disponibilidad de agua en el perfil puede jugar una mala pasada si no se está atento. “En el caso de rastrojos de trigo o cebada que iban a ser antecesores de las pasturas es posible que se reactive el crecimiento de malezas de verano”, indicó el especialista, quien recomienda controlarlas para llegar al momento de la siembra de pasturas con lotes limpios.

Entre los aspectos centrales que priorizó Castaño se encuentra el análisis de suelo. “Es importante conocer las características del suelo para corregir alguna deficiencia antes de la implantación”. Y aclaró que “en el caso de suelos bajos hay que evaluar si el lote tiene riesgo de anegamiento, encharcamiento o alcalinidad para decidir qué especies poner y cómo realizar la siembra”.

Para esto, es importante planificar con tiempo la siembra y tener en cuenta las buenas prácticas de manejo de pasturas. En este sentido, advirtió que hay que “sembrar en tiempo y forma, lo que permitirá al productor contar con forraje disponible en otoño – invierno y anticiparse a la llegada de la primavera”.

Asimismo, el técnico del INTA resaltó que siempre se debe utilizar semilla fiscalizada y de calidad reconocida. Además, “es esencial la regulación y el control de la sembradora y el análisis del ambiente antes de decidir qué especie sembrar”, expresó quien analizó: “Si el ambiente es de pelo de chancho, la recomendación es que se decida por algún agropiro; en cambio, si es de gramón, aconsejamos festuca alta”.