La Compañía de General Cabrera, líder en la producción y exportación de Maní, comenzó a fabricar ladrillos con la cenizas de la cáscara de maní.
La empresa Prodeman, una de las fuertes compañías, líder en la producción de maní y otros cultivos, acaba de dar un paso más adelante en el agregado de valor. Comenzó a fabricar ladrillos, con destino a la construcción, utilizando nada más ni nada menos que la ceniza del proceso de quema de cáscara del maní, que a su vez era utilizada como combustible en los hornos de la compañía para generar energía.
«La idea surgió de un Ingenerio Agrónomo de Río Cuarto, Mauro Uberto, al que le consultamos que podíamos hacer con la gran cantidad de ceniza que se nos acumulaba por la quema de la cáscara de maní en caldera que produce energía», comentó a MundoAgroCba Mauro Cavigliasso de Prodeman. » Le dí dos bolsas con las cenizas, dado que Uberto tiene un laboratorio de suelos, especialmente para conocer que características tenian esos residuos y sobre todo, para saber si eso se podía devolver al suelo. El Ingeniero me devolvió dos ladrillos que hizo con un molde en su casa. Así comenzó todo», agregó Cavigliasso.
La idea de cerrar el círculo en el valor agragado entusiasma a los técnicos de Prodeman. La firma tuvo una excelente campaña productiva con maní, stán focalizados en la producción y tras la muy buena cosecha ya se usa desde hace un año la cáscara para generera energía. «Ahora estamos dando los pasos legales para lanzar la producción de ladrillos con el desarrollo de distintas formulaciones y alternativas, aunque en la que más estamos centrados es en un bloque para que pueda ser utilizados en la edificación. Para nosostros -apuntó sobre el final Cavigliasso – es una forma de seguir apostando a la búsqueda de soluciones ambientales pensando en una producción más sustentable».
