¿Qué tan lejos estamos de ser el supermercado del mundo?

Fobbing, inflación, relación público-privado, proyecto de carnes, son algunos de los temas sobre los que hay que trabajar si se quiere ganar en competitividad agroindustrial.

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    Se realizó el Seminario sobre Competitividad Agroindustrial Argentina en el Exterior organizado por RIA Consultores.

Diferentes referentes del sector público y privado de la industria molinera, de la carne y la maquinaria, brindaron un diagnóstico sobre la situación agroindustrial argentina en un Seminario organizado por RIA Consultores.

“Si vemos la evolución de las exportaciones agroindustriales hubo un crecimiento entre 2000-02 y 2010, y a partir de allí, un retroceso. ¿Por qué? ¿Qué sucede? ¿Estamos en condiciones de ser el supermercado del mundo?”, planteó Javier Patiño, director de RIA Consultores, al inicio del debate.

Persevera y…

Para Patiño, “Somos muy caros en todo el proceso de exportación (fobbing) y al dólar no lo podemos tocar demasiado”.

Al respecto, señaló que hay que ser competitivo ajustando lo que hay ajustar: el tema impositivo, logístico, costos de transformación (mano de obra), energético y recibir alguna ayudita, como pueden ser los reintegros a la exportación.

Desde su punto de vista, el camino es muy largo para llegar a eso y hoy, “vamos a seguir teniendo un rol preponderante como exportadores de materia prima. Esperemos que podamos volver al punto de partida que teníamos en la exportación agroindustrial”, reflexionó.

Al ser consultado por Agrofy acerca de los sectores agroindustriales, enfatizó: “Argentina tendría que ser un monstruo exportador de leche, queso, manteca y, ahí seguimos mal”. Agregó que “en molienda de maíz y de trigo, pollo y cerdo, tenemos mucho para hacer, ahí están las oportunidades”.

Fobbing, protagonista del problema

“Venimos de años complejos, estamos bien, tomando altura y con un futuro promisorio en lo que hace a volúmenes de exportación”, expresó Diego Cifarelli, presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera.

En sintonía con Patiño, también dijo que es necesario mejorar los costos en el fobbing que hoy son muy altos y que el Gobierno está trabajando en eso. “Hay que despeinarlo al costo, son muchos impuestos, muchas tasas y después ver de qué manera podemos ir reintegrando los impuestos en los que incurrimos cuando exportamos una tonelada”, precisó a este medio.

Destacó: “El brillo individual no es suficiente, cuando hablamos de cadena de valor, necesitamos el brillo de todas”.

Desde el Ministerio de Agroindustria, estuvieron presentes, Luis Urriza, subsecretario de Agricultura y Jesús Silveyra, subsecretario de Mercados Agroalimentarios.

Siguiendo el eje del seminario, Urriza aclaró: “La competitividad no la vamos a lograr por el tipo de cambio, tiene que ser real y el Estado está trabajando en fomentar reglas para todo el sector”.

Respecto al comercio exterior de harina, opinó: “Está en una situación incipiente, pero hay un potencial para exportarlas”. Argumentó: “Superar exportaciones de 11 millones de toneladas de trigo y 1 millón de toneladas de harina, se puede”.

En relación a la apertura de mercados, Silveyra, se refirió a la India como un mercado estratégico clave, “si continuamos el nivel de relaciones va a traernos muy buenos frutos». Anticipó que en noviembre realizarán una misión a Egipto para darle impulso a un acuerdo de libre comercio con el Mercosur.

Contra la informalidad

“Para que haya competitividad tienen que funcionar los engranajes: productividad, costo y combatir informalidad”, así lo expresó Dario Panattieri, responsable de exportación de Ecocarnes S.A.

Panattieri, reconoció que en el interior de la cadena aún hay mucho para trabajar en cuanto a los aspectos productivos, comerciales y las inversiones, donde existen muchas oportunidades de mejora.

En este sentido, el industrial detalló que el 85% de sus costos de producción están atados al precio de la hacienda, que respecto a Uruguay y Paraguay es similar, pero en comparación a Brasil es mucho más cara.

En tanto, opinó que combatir la informalidad es fundamental. Advirtió, que los costos laborales atentan contra la competitividad y la decisión de inversión, y resaltó el trabajo que está realizando el Gobierno con la apertura y recuperación de mercados.

Política de carnes del Estado

La buena genética, el buen manejo y la sanidad, son pilares fundamentales y la inversión para estar al día con lo que es tecnología, según Roberto Domenech, presidente del Centro de Empresas Exportadoras Avícolas.

«Insistimos mucho en que debe haber un proyecto de todas las carnes: ¿dónde estamos y a dónde queremos ir?”, se preguntó.

Al ser consultado por Agrofy, Domenech aclaró que las empresas tienen la repuesta. Pero, “es importante que el sector defina donde está, y a dónde quiera ir y en esa ambición, poder concentrarnos en lo que sea una política de carnes del Estado”.

Domenech, insistió en que las empresas tienen que organizar un proyecto sectorial e insertarlo en el proyecto país. “La pregunta es: ¿Las carnes están en el proyecto país o son algo más que se puede producir en Argentina? Ese es el concepto que tenemos que profundizar entre las tres carnes en la misma mesa de Agroindustria”, resaltó.

En este contexto, es interesante la mirada de Carlos Braga, presidente de Santa Fe Global, quién manifestó durante el seminario: “Menos papper y más investigación aplicada”

Por su experiencia en el mercado de la maquinaria agrícola, reiteró en varias oportunidades, la necesidad de aplicar estrategia. “Los mercados están, hay que investigar y saber vender el producto. Hay que ver como cada mercado tiene su especificidad y abordarlo de forma sistémica”.

Además, sostuvo: “Si no hacemos entramados público-privado, nuestras pymes se caen”.