Semillas reforzadas con zinc para sumarle 200 kilos más al trigo

La fertilización del trigo desde la presiembra favorece el desarrollo tanto de la raíz como de la planta y mejora los rendimientos. Las recomendaciones de Compo Expert.

El trigo ya entró en la cuenta regresiva: en un mes, las sembradoras comenzarán a circular por los campos de todo el país y, además de adquirir las semillas, los productores ya empiezan a pensar y ejecutar las estrategias que seguirán para poder lograr una buena cosecha tanto en cantidad como en calidad.

Una de ellas: la fertilización. Y si bien el nutriente sobre el que más suele hacerse foco es el nitrógeno, desde la firma Compo Expert recomiendan un planteo que también potencie este nutriente con el suministro de zinc.

“En una red de evaluación de análisis de suelos en 2011 se determinó que el 47 por ciento de los lotes tenían deficiencia de zinc. En 2018  la cifra ronda entre 67 y 70 por ciento”, señala Edgardo Arévalo, gerente de Desarrollo de la compañía para Latinoamérica.

Desde su punto de vista, un aspecto clave es que “pensar en zinc, significa automáticamente pensar en nitrógeno, porque una de las funciones del zinc es que la planta haga un mejor uso del nitrógeno que pueda captar”.

Técnicamente, Arévalo relata que el zinc colabora  con la síntesis de hormonas de crecimiento que inducen el desarrollo de la parte aérea de la planta; y también de las raíces. “Con mayor despliegue radicular, se aumenta el volumen de suelo explorado, lo que permite capturar mejor nutrientes como nitrógeno y fósforo, y absorber más agua”, indica el ejecutivo.

Productos

En este marco, Compo Expert recomienda dos productos: Nutriseed y Easy Start.

Nutriseed es un tratamiento a semilla a base de zinc que, de acuerdo con los ensayos realizados por la empresa en los últimos seis años, es capaz de aportar un rendimiento extra de 283 kilos por hectárea. “Para un tratamiento a semilla es mucho, teniendo en cuenta que es relativamente bajo su costo de aplicación”, explica Arévalo.

Este producto se puede aplicar junto a otros terápicos dentro de un caldo para tratamiento de semillas. La recomendación es una dosis de 300 centímetros cúbicos por cada 100 kilos de semilla. “El trigo requiere como base unos 40 gramos de zinc por tonelada producida, y con esto le estamos aportando el equivalente a 250 gramos. La ventaja es que, con una concentración tan alta, el nutriente permanece activo durante todo el ciclo del cultivo”, menciona Arévalo.

En cuanto a Easy Start, es un microgranulado que se aplica a la siembra, que refuerza el contenido de nitrógeno y además suma fósforo, zinc, hierro y manganeso. “Se aplica en la sembradora y tiene muy alta solubilidad, lo que permite una asimilación en estadíos temprano de la planta”, añade el Gerente de Desarrollo de Compo Expert.

Y completa: “Con entre 20 y 30 kilos por hectárea, fertilizo fósforo para un buen arranque. Y además logro un aprovechamiento de más del 80 por ciento de la aplicación”.