Nidera mostró en Tandil el potencial de su genética y las claves de manejo para maximizar rindes en trigo

La marca presentó en Tandil su porfolio completo de variedades, anticipó lanzamientos y profundizó en las claves agronómicas y económicas —desde la nutrición hasta la sanidad— que definen los resultados de la campaña 2024/25, destacando el rol del monitoreo como base de la gestión sustentable.

Nidera Semillas celebró una nueva edición de su Campo Líder Trigo en Tandil, un evento diseñado para acercar información técnica, resultados experimentales y el posicionamiento de sus principales variedades a más de 70 productores y asesores. El encuentro permitió recorrer ensayos de genética, fertilización y manejo sanitario, sembrados en un lote con antecesor papa y enmarcados por las sierras.

Portafolio y Próximos Lanzamientos

El objetivo de la jornada fue mostrar el comportamiento del portafolio completo bajo dos fechas de siembra diferenciadas: principios de junio para los ciclos más largos y principios de julio para las variedades intermedias y cortas. Esta estrategia permite evaluar la estabilidad y plasticidad de cada trigo en escenarios contrastantes.

Entre las variedades expuestas, se destacó la de ciclo largo Baguette 820, recomendada para ambientes de alto potencial de la zona. Para los ciclos intermedios se presentaron el popular Baguette 620 y el nuevo 610 Baguette, que ofrece una sobresaliente sanidad junto a un altísimo potencial de rendimiento. Los ciclos cortos exhibidos incluyeron Baguette 525 y 460 Baguette.

Otto Goedelmann, gerente comercial de Autógamas de Nidera Semillas, anunció que, aunque la productividad sigue siendo el principal impulsor de la selección, la sanidad «hoy corre muy de cerca», especialmente en el control de royas y manchas, componentes clave en la decisión de avance comercial de cada variedad. Además, se presentaron dos variedades experimentales próximas a lanzamiento, incluyendo un ciclo intermedio con un perfil sanitario y de rendimiento excelente, y un ciclo corto que complementará la oferta actual, evaluado en el Sur y en la zona central del país.

Claves Agronómicas y Sanitarias

Santiago Garrote, extensionista de Nidera, resaltó que la fertilización dividida de nitrógeno está mostrando «muy buenas respuestas». Garrote enfatizó que el mayor impacto en el rendimiento se obtiene cuando se logra integrar la fecha de siembra, la nutrición y el manejo sanitario.

El asesor Diego Álvarez analizó las variables que influyeron en la expresión del potencial de rendimiento para la campaña 2024/25. Álvarez puntualizó que los excesos hídricos registrados en agosto generaron una alta probabilidad de pérdida de nitratos, lo que afectó el número de granos por m² en situaciones donde no se realizó una refertilización oportuna. También destacó la relevancia del coeficiente fototermal (Q) en Tandil, donde los días despejados y frescos contribuyen a aumentar el peso de mil granos.

En cuanto a la protección del cultivo, Álvarez insistió en que «el monitoreo es la base de un manejo sustentable». Es fundamental reconocer la fenología del cultivo, cuantificar las adversidades y seleccionar los fungicidas más adecuados para el potencial de cada lote. Álvarez explicó que para identificar el fungicida correcto es necesario cuantificar la severidad, relacionar la fenología con la condición ambiental y la presión de inóculo, ajustando dosis y activos combinados según la expectativa de rendimiento. La determinación del estado de llenado del grano mediante la escala Zadoks se consideró crítica para el seguimiento sanitario.

Panorama Económico y Recomendaciones para la Campaña

Desde una perspectiva económica, el asesor CREA y consultor regional Diego Aguilera señaló que, aunque el trigo mantiene muy buenos rindes potenciales, su margen podría verse afectado por precios deprimidos ante la gran producción nacional esperada. En contraste, la cebada (tanto forrajera como cervecera) y el girasol alto oleico se posicionaron como los cultivos «estrella» por su rentabilidad y márgenes favorables.

Ante este panorama, Aguilera brindó varias recomendaciones:

1. Cebada: Adelantar la cosecha lo más posible para reducir las pérdidas por quebrado.

2. Trigo: Sugirió retener el cereal —si la situación financiera lo permite— para su venta a partir de marzo.

3. Manejo General: Cumplir con los esquemas de fertilización, recomendando 90 kg de N para girasol y 170–180 kg de N para maíz, con la inclusión de azufre y zinc.

4. Soja: Impulsar las variedades Enlist para lograr un control eficiente de malezas difíciles como rama negra y yuyo colorado, y reforzar los rubros de fertilización e inoculación, donde se observan «mayores respuestas» año tras año.

La jornada Campo Líder realizada en Tandil reafirma el compromiso de Nidera de acompañar a los productores en la toma de decisiones que abarcan desde la elección de la semilla hasta la comercialización de la cosecha.