Si bien la intención de siembra inicial es de 2,72 millones de hectáreas, 20% menor a la anterior, expertos aseguran que podría consolidarse una tendencia en aumento.
Una tendencia hacia el aumento del área del cultivo de maíz en la Argentina se manifiesta destinada a planteos tardíos y de segunda ocupación, según el Panorama Agrícola Semanal de la Bolsa de Cereales porteña.
El informe señala que se podrían encontrar las primeras restricciones de incremento por la superficie que ya se encuentra con barbechos químicos cerrados para soja y los potenciales excesos hídricos en sectores del área central del país.
«Frente a este panorama mantenemos la intención de siembra inicial en 2,72 millones de hectáreas para la campaña 2015-2016», dijeron los especialistas, al señalar que se trata de un área 20% abajo en comparación al ciclo previo que fue de 3,4 millones de hectáreas.
Según un cable de la agencia de noticias NA, sobre esta estimación de superficie según el PAS, el avance de siembra cubrió a la fecha el 37,1 % del área y la variación intersemanal se ubicó en 0,6 puntos porcentuales.
El reporte analizó que durante la última semana continuó de manera lenta la siembra de cuadros de maíz con destino grano comercial correspondiente a la campaña 2015-2016.
Los mayores progresos de siembra de primera se concentraron nuevamente en el extremo sur del área agrícola nacional, con fuerza y sólo se retrasaron por precipitaciones, «que por otro lado aseguraron una correcta emergencia de los lotes ya sembrados», según el reporte. Hacia el extremo norte de la zona del Centro-Norte de Santa Fe, los cultivos tempranos se encuentran en la etapa de panojamiento y lotes puntuales en floración. Los cuadros poseen una excelente condición hídrica y se reportan «aplicaciones puntuales de insecticidas. En cambio, hacia el sur de esta región, los cuadros transitan etapas de diferenciación foliar bajo condiciones hídricas regulares», indicaron los técnicos.
Hacia la región Centro-Este de Entre Ríos los cuadros se encuentran con diferenciación de hojas y continúan las aplicaciones a fin de controlar ataques ya generalizados de gusano cogollero (Spodoptera frugiperda).
«Sobre la región central del país las tormentas severas que se presentaron afectaron parte de los cuadros tempranos del cereal. Todavía no hay una estimación del nivel de pérdidas originadas por el fenómeno. Las mismas estarían vinculadas al daño directo por granizo y a los anegamientos en zonas bajas de los potreros», señalaron.