Una planificación anticipada, la evaluación precisa de los recursos forrajeros y una vigilancia sanitaria activa son fundamentales, según el INTA, para mitigar el impacto de los excesos hídricos en los sistemas ganaderos.
Ante la situación de exceso hídrico que afecta una superficie importante de la Pampa húmeda debido a las abundantes precipitaciones registradas en lo que va del 2025, especialistas del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) han brindado recomendaciones clave para preservar al ganado. Estas pautas abarcan tanto el manejo forrajero como las consideraciones sanitarias en un contexto desafiante para los establecimientos agropecuarios.
La coyuntura actual encuentra a los productores en pleno destete de terneros, con un porcentaje de establecimientos realizando pariciones otoñales (especialmente en vaquillonas), y al mismo tiempo, llevando a cabo la siembra de verdeos y pasturas que se encuentran en etapas iniciales de implantación o desarrollo.
Gestión estratégica del forraje
Una de las primeras y más importantes recomendaciones es realizar un balance forrajero lo más ajustado posible para los próximos meses. Para ello, es imprescindible evaluar la gravedad y posible duración de la inundación, así como la posición del campo en el relieve.
Determinar el stock actual de pasto disponible en los potreros no anegados o factibles de pastorear es fundamental. Esto puede hacerse mediante estimación visual, cortando y pesando muestras en verde, o utilizando herramientas digitales. Es crucial contrastar la oferta forrajera actual y a corto plazo con la demanda del rodeo para los próximos meses, basándose en las existencias de las distintas categorías animales. Una vez que se tiene este balance, se puede actuar sobre sus componentes: la oferta y la demanda.
En los sectores de pasturas que no se ven afectadas por la inundación, se recomienda, siempre que sea operativamente posible, parcelar la fracción no inundada de la mejor manera y aplicar fertilización nitrogenada en esas áreas. Además, se sugiere sembrar verdeos de invierno como avena o raigrás. Esto puede hacerse al voleo en zonas sin piso para maquinaria, o con sembradora en lotes con piso firme, incluyendo aquellos que salen de agricultura o donde se realizan intersiembras en pasturas degradadas. El INTA enfatiza la importancia de sembrar lo más anticipado posible, ya que se estima una pérdida de 75 kilos de masa seca aprovechable en el período crítico (mayo-agosto) por cada día de retraso en la siembra.
Pautas Sanitarias Clave
El exceso hídrico y las condiciones asociadas también traen consigo riesgos sanitarios. Uno de los problemas frecuentes es la aparición de parásitos gastrointestinales. El aumento de la carga instantánea (más animales por superficie utilizable) junto con la elevada humedad ambiental favorecen la contaminación de las pasturas y aceleran el contagio, especialmente entre animales jóvenes.
Para el manejo de parásitos internos, es necesario realizar un monitoreo mensual mediante la técnica de Huevos por Gramo de Materia Fecal (HPG) para determinar el momento adecuado para un tratamiento antiparasitario. Es igualmente importante efectuar un chequeo post tratamiento (15 días después) también con HPG para evaluar la eficacia del producto y detectar posible resistencia.
En cuanto a Fasciola hepatica, las áreas geográficas de presentación pueden verse ampliadas debido a la dispersión del caracol que actúa como hospedador intermediario. En caso de sospecha clínica (signos como pérdida de condición corporal y pelo hirsuto y descolorido en categorías adultas), se debe realizar un análisis de materia fecal específico para esta enfermedad.
La sarna es otro riesgo, ya que el hacinamiento y una posible respuesta inmunológica deficiente en los animales contribuyen a un aumento del contagio y dificultan su control. El INTA recomienda realizar un tratamiento inyectable y eficaz a todos los animales si se observan casos con síntomas.
Finalmente, en situaciones donde se haya producido un atraso en los destetes, es posible que también se vean postergadas algunas aplicaciones de vacunas y tratamientos antiparasitarios. Los especialistas recalcan la importancia de respetar los tiempos entre aplicaciones para evitar futuros inconvenientes sanitarios.
