La innovación complementa la información existente sobre el agua en el suelo y permite identificar áreas donde las precipitaciones superan la capacidad de almacenamiento, ofreciendo una visión estratégica para la planificación agrícola y la gestión territorial.
El Instituto de Clima y Agua del INTA ha dado un paso significativo en la gestión de recursos hídricos al incorporar un nuevo producto a su plataforma SEPA (Sistema de Estimación de la Producción Agropecuaria): los mapas de excedentes hídricos. Esta herramienta es crucial, ya que el agua es un factor determinante para la producción agropecuaria, donde su exceso puede dificultar las labores de siembra o cosecha, mientras que su falta limita el rendimiento.
Definición y Funcionamiento del Excedente
El objetivo fundamental de este nuevo desarrollo es mostrar en qué lugares las precipitaciones superan la capacidad de retención de agua de los suelos. Lucas Gusmerotti, investigador del Instituto de Clima y Agua del INTA Castelar, explicó que la herramienta identifica este excedente que puede escurrir, acumularse en superficie o recargar las napas.
Los excedentes hídricos se generan cuando la precipitación excede tanto la evapotranspiración como la capacidad de almacenamiento del perfil del suelo. Según el modelo de SEPA, este excedente sale del sistema y se expresa en milímetros de lámina de agua.
Cuando los perfiles del suelo están llenos, la evapotranspiración es baja y las lluvias son abundantes, los excedentes pueden permanecer largo tiempo en la superficie, lo que complica significativamente la siembra o la cosecha. La capacidad de visualizar este fenómeno con anticipación se convierte en una herramienta de gran valor para los productores.
Beneficios para el Productor y la Planificación
Estos nuevos mapas se integran a la información ya disponible en SEPA, como el confort hídrico y la variación de agua disponible. Jorge Mercau, especialista de recursos naturales del INTA San Luis, subrayó el impacto directo en las decisiones de manejo: “Con este nuevo producto, los productores podrán anticiparse a los problemas que generan los excesos de agua, planificar labores y comprender mejor la dinámica hídrica de sus lotes y regiones”.
La información se genera mediante la utilización de información satelital, datos meteorológicos provistos por la red INTA-Servicio Meteorológico Nacional y las cartas de suelo del INTA. Los mapas se actualizan cada 10 días y se publican en acumulados mensuales, correspondientes al día 10, 20 y fin de mes.
Con este desarrollo, disponible de manera abierta en la web del sistema, el INTA reafirma su compromiso de proporcionar información estratégica para la gestión del agua, un recurso que se considera cada vez más crítico para la producción agropecuaria y la sostenibilidad de los territorios.





