El barbecho corto requiere un manejo contundente para frenar el avance de malezas cuya presión crece año a año. Se estima que en el 60% de los lotes conviven, al menos, dos malezas problema. FMC propone planificar, actuar anticipadamente y respetar la rotación de principios activos.
Una nueva campaña de granos gruesos se avecina y los ojos de todo el país -situación macroeconómica mediante-, están puestos en la performance que tenga el campo. También para los productores será una campaña clave en la que necesitarán más que nunca obtener excelentes resultados finales para mitigar la coyuntura. Y el paso inicial es enfrentar en forma preventiva el nacimiento de malezas problema y cortarles de cuajo las posibilidades de complicar luego los rendimientos. Los productores deberán analizar a fondo su estrategia. Actuar rápido, de manera planificada les va a permitir reducir considerablemente los costos, usar menos productos y cuidar el ambiente.
Hoy por hoy los productores siguen a la espera de las lluvias. Se estima que cuando estas se regularicen, comenzarán a delinear sus estrategias. En lo que respecta a los cultivos de cobertura, si bien es una práctica indispensable para frenar a las malezas, todavía es escasa su adopción. Para Caporicci: “Ni bien se normalicen las lluvias germinarán las malezas primavero-estivales y los productores que el año pasado debieron lidiar con rama negra, viola, parietaria y cualquiera de las conocidas, podrán usar un producto de contacto que los ayude a salir del invierno. FMC promueve Shark (PPO) que controla malezas sin dejar residuo en suelo, y no limita el uso de otro PPO en la campaña ”. Paralelamente, el especialista indicó que es la táctica más común en la región núcleo, hacer un quemado en septiembre y a la siembra un pre emergente residual. “El productor puede quemar con un PPO y agregar un residual como Pelicán (HPPD) en el mismo tratamiento para cubrir los nacimientos hasta la siembra”.
Vale considerar que a nivel nacional el 60% de los lotes ya tienen más de dos malezas resistentes conviviendo y requieren un manejo diferencial, con costos que pesan más y toman relevancia en los márgenes productivos. Si bien aún son pocos, algunos agricultores comienzan a trabajar con el solapamiento (overlaping) de herbicidas. “Lo hace un 10% que tiene lotes con altísima presión de ambos tipos de maleza es decir hoja ancha y gramíneas”, y recordó que la dispersión de Eleucine spp y/o Echinocloa spp ya alcanzan los 8 millones de hectáreas en el país y el Yuyo colorado a 12 o 13 millones de hectárea. “En el overlaping recomendamos usar Command 36 CS para barbecho corto junto con Pelicán. Seguido a lo anterior, y antes de que se termine la residualidad de los primeros, se planifica la aplicación de Capaz MTZ ( en los lotes con alta presión de Yuyo Colorado) y/o Capaz Elite en lotes con malezas combinadas. Con este manejo rotamos modo de acción, y buscamos mantener con muy baja expresión el banco de semillas de las malezas” recomendó Caporicci.
Otra parte del manejo que comienza a jugarse en esta etapa es la aplicación de insecticidas para suelo. Entre las plagas más importantes del segmento se distinguen las Orugas Cortadoras y Dichelops o “Chinche de los cuernos”. EL Ing. Agr. Francisco Francioni Gerente de Insecticidas de FMC para Cono Sur recomienda que el productor ponga atención en especial, en La Pampa, Oeste Prov. Bs As., Sur Santa Fe y Sur Córdoba donde existe una presión alta y media de orugas cortadoras. “Por otra parte, aconsejamos tener bien presente a la región endémica de Dichelops, (que afecta fundamentalmente a maíces de siembra de primera sembrados en septiembre – octubre) es la zona central – Núcleo, Norte Bs As, Sur Santa Fe, Sudeste Cba. y Zona central comprendida entre ruta Nacional 8 y hacia el norte ruta 19. Desde FMC proponemos el uso Mustang en una dosis de 100 cc/ha para cortadoras y 250 cc/ha para Dichelops”. Por su parte el especialista también recomendó el us0 de Archer Plus para Cortadoras en una dosis de 25 -30 cc/ha. Hay que tener en cuenta que Cultivos Girasol, Maíz y Soja comienzan a implantarse en 20 días aproximadamente según las zona. Por otra parte, Girasol y Maíz son cultivos muy dependientes de la densidad lograda del cultivo, por ende, es importante lograr una densidad optima, cuidando el cultivo de las plagas de suelo, conocidas como Orugas cortadoras y Dichelops (chinche de los cuernos). Considerando algunos números, vemos que 1 cortadora puede cortar/comer 4-5 plantas de girasol/maíz. Con una población de 0,1 cortadora/ m2, tenemos 1000 cortadoras/ha. Si 1 cortadora afecta 5 plantas, tenemos que 1000 cortadoras cortan 5.000 plantas por hectárea de maíz o girasol. Para una densidad de siembra de 60.000 plantas estamos hablando 8-9% de reducción del stand de plantas. En cultivos que no son compensadores como la soja, la perdida de rendimiento es mas que relevante. Para evitar estas pérdidas, es importante el monitoreo y el seguimiento de los lotes previo a la siembra del cultivo. De forma tal de mantener la uniformidad en el stand de plantas del cultivo, de manera que no impacte de manera negativo en el rendimiento posible de ser obtenido. Mustang y Archer Plus son productos que se comportan de manera muy efectiva en el suelo, debido a la formulación que presentan. Por su parte Mustang tiene una formulación EW (emulsión de aceite en agua) con una muy buena solubilidad que permite traspasar rastrojos y llegar al suelo que es donde se encuentran las plagas. Mientras que Archer Plus es una suspensión encapsulada, de microcápsulas que tiene una liberación lenta en el suelo, con lo cual presenta una persistencia de 8-10 días. Por ultimo y para lograr la máxima eficiencia en el control, el perfil de suelo debe tener buena humedad, de esta manera lograr una buena difusión del producto y que el mismo llegue a estar en contacto con las orugas. Hay que tener en cuenta que los controles más eficientes con aplicaciones realizadas durante la tarde noche y aumenta más la eficiencia en la noche de la siembra del cultivo, dado que la remoción del suelo hace que las cortadoras se muevan y sean más fácilmente controladas por los insecticidas.
Finalmente, la financiación será un tema fundamental de este ciclo. Se estima que un 90% de los productores que aún no han comprado productos comienzan en esta etapa a definir sus planeos y necesitarán financiación. “En FMC estamos conscientes por eso planeamos acompañarlos a través del canje de granos, o bien la formulación de operaciones a dólar abierto al igual que las ventas con tarjetas de crédito con vencimiento en mayo/ junio de 2018”.
Cabe considerar que la mejor estrategia de barbecho es un manejo planificado. Como bien indica Caporicci “NO ser preventivo, nos direcciona al control post-emergente que implica no solo el costo de la aplicación del herbicida propiamente dicho, sino también, el producto herbicida. Esto puede variar entre unos u$s35/40 por hectárea al que hay que sumarle costo metabólico que implica para el cultivo recomponerse de esta aplicación, versus un tratamiento pre-emergente premium de los mismos u$s 35 a 40 dólares por hectárea, que minimiza el impacto del herbicida al cultivo y reduce considerablemente la competencia que las malezas ejercen sobre los cultivos”. Así, en tema malezas se puede prever y planificar. El escenario futuro es complicado y conviene que el productor no se confíe con los tratamientos de rescate que pueden terminar siendo extremadamente onerosos, pues no el costo muchas veces es incierto.
