Las posibles medidas que surjan del Gobierno son seguidas de cerca por los productores, tras el anuncio de la suspensión de exportaciones de harina y aceite de soja.
Ante un inminente cambio en las retenciones, fuentes oficiales de Casa Rosada indicaron a Télam que el Presidente mantuvo contacto con Julián Domínguez (Agricultura) y con otros ministros del área económica durante el fin de semana. De hecho, se decidió suspender el registro de exportaciones de harina y aceite de soja hasta el anuncio de medidas.
En este sentido, Alberto Fernández se reúne hoy con Domínguez para analizar el alza de precios de las exportaciones de diversos productos, al tiempo que aclararon que una suba de retenciones «solo lo puede hacer el Congreso». De igual manera, adelantaron que podrían conocerse medidas en las próximas horas.
«Hay que sacar el tema de la suba de retenciones. Eso solo lo puede hacer el Congreso», señalaron a Télam voceros cercanos a Fernández.
En ese sentido, explicaron que en el abanico de medidas que se podrían adoptar para mitigar el impacto interno de las subas, se cuentan desde los fideicomisos hasta el aumento del diferencial del Derechos de Exportación, donde el Ejecutivo tiene aún margen de acción sin pasar por la legislatura.
Afectación en el sector Agroindustrial
La medida cayó mal en el sector exportador. Ante la noticia, la Cámara de la Industria Aceitera Argentina (CIARA) le respondió al Gobierno y argumentó que se va a afectar el ingreso de divisas y el empleo en el cordón agroindustrial.
Además, agregaron: “Pone fin a los fideicomisos de maíz, trigo y aceite, puesto que cambia las condiciones de comercio exterior”. En este sentido, CIARA destacó que trata de una decisión del ministro de Economía, Martín Guzmán, es subir en dos puntos las retenciones al complejo agroindustrial.
Por su parte, el presidente de CIARA, Gustavo Idígoras, dijo que la justificación del ministro de Economía, Martín Guzmán, es que la agroindustria tiene que “pagar la cuenta del gas importado”. El empresario destacó a La Nación que se aumentará la capacidad ociosa de la industria, así que las condiciones de empleo son muy negativas a partir de esta decisión.
“El impacto en la industria es muy negativo porque pone en riesgo 20.000 puestos de trabajo y el ingreso de divisas de la Argentina que, a partir de abril, empieza a brindarle las únicas divisas genuinas que tiene el Gobierno”, concluyó Idígoras.
Fuente: Agrofy News.