Desde Maizar alertaron por la falta de incentivo en los productores para comenzar con la implantación temprana del ciclo 2015/16.
La cadena de valor del maíz sigue con “mucha preocupación” el desinterés que exhibe el productor maicero de cara a comenzar la siembra temprana en la campaña 2015/16, a instancia de la falta de un precio competitivo, de mercados externos y el incremento que experimentan los costos internos movilizados por la inflación.
Así lo indicó Martín Fraguío, gerente ejecutivo de la Asociación Maíz Argentino (Maizar), quien comentó: “Todavía no empezamos con la siembra de maíz temprano, que seguimos con mucha preocupación a partir de los estudios realizados, que dan cuenta que la situación es gravísima de acuerdo a la baja intención de siembra que hoy ofrecen los productores maiceros“.
Según Fraguío, la apatía y dejadez que se preanuncia para la próxima cobertura maicera se debe a que “hoy no están dadas las condiciones para los productores”, que no contarían con las posibilidad obtener rentabilidad a fin de la cosecha.
La Bolsa de Comercio de Rosario explicó que, con un precio en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) de u$s122 por tonelada de maíz comercializada en abril de 2016, el productor podría llegar a contar con un margen positivo de u$s80 por hectárea. La entidad rosarina refirió que si el valor bruto de la cosecha ofrece u$s1.642 por hectárea, allí el productor se quedaría con el 5 por ciento.
No obstante, los especialistas indicaron que de mantenerse los precios actuales para el caso del maíz, es decir de u$s100, allí el productor perdería plata luego de afrontar el pago de insumos e impuestos. Con un valor bruto de u$s1.529 obtenidos por hectárea, de los cuales el 61% se destinaría al pago de proveedores de insumos y otro 25% a abonar impuestos, y un margen del 18% para los compradores, el productor debería al finalizar todas las operaciones poner un saldo de u$s55 por hectárea.
“Los números son muy malos cuando la siembra aún no ha comenzado”, reconoció Fraguío, quien expresó que “es muy grave” lo que sucede con la formación de los precios tanto en el orden internacional como en el interno.
“La Argentina tiene un sistema de cierre de exportaciones o cuotificación a través de los ROE (Registros de Operaciones de Exportación) e impuestos a la exportación que le hace un daño enorme al precio que recibe el productor que vende al exterior su producción“, indicó el funcionario de Maizar.
Agregó que “otro problema son los costos: en la Argentina vienen creciendo a un ritmo mayor a los que exhiben otros países competidores y tiende a agravarse con la proximidad de la futura cosecha”.
Según Fraguío, “hoy la Argentina tiene los precios de los granos más baratos del mundo y los costos de producción agrícola, y de comercialización, más altos del mundo”, y a manera de ejemplo consignó que el valor del gasoil ronda “entre u$s1,3 y u$s1,5, mientras que en los países competidores este costo está por debajo, a u$s0,70 por litro”.
Pese a que existen informes privados que dan cuenta de una estimación de caída de hasta un 40% en la futura siembra maicera, la previsión pre-siembra realizada por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires advirtió sobre la posibilidad de contar con una merma de un 20%, con una superficie a implantar de 2,72 millones de hectáreas para el ciclo 2015/16.
FUENTE: DyN