El trabajo con imágenes satelitales amerita ajustes en el área sembrada con maíz y soja. Se suman 510.000 ha al cereal y se restan 370.000 ha a la soja. Con esta nueva base, se suman 4 Mt a la estimación de producción de maíz y se resta 1 Mt a la de soja.
El trabajo con imágenes satelitales amerita ajustes en el área sembrada con maíz y soja. Se suman 510.000 ha al cereal y se restan 370.000 ha a la soja. Con esta nueva base, se suman 4 Mt a la estimación de producción de maíz y se resta 1 Mt a la de soja.
A pesar del spiroplasma y la falta de agua en setiembre, Argentina sembró más área con maíz
Sin ajustes de rindes, y solo considerando un cambio en el hectareaje, la estimación de producción maicera se ajustó de 44,5 Mt en marzoa 48,5 Mt en este mes.Se han sumado 510.000 ha más en este ajuste, con lo que el total nacional asciende a 8,3 M ha. De allí se estima que se cosecharían 7,0 M ha. Coneste nuevo ajuste, la caída interanual en área, que antes se calculaba en un 24%, ahora pasa a un 20%.

A partir de trabajo satelital realizado, se estima que se sembraron casi370.000 ha menos de soja y unas 400.000 ha másde maízrespecto a lo que se estimaba. También el SIBER de la Bolsa de Entre Ríos con su trabajo satelital advierte lo mismo en la provincia: casi 50.000 ha más de maíz.A estose le han sumado ajustes positivos de área en el centro este de Buenos Aires por 60.000 ha.
En general se trata de hectáreas que se sembraron con maíz temprano. Han sido determinantes particularmente las lluvias de Santa Rosa y, luego, los eventos de lluvias que se dieron en la región central entre el 8 y 14 de octubre. A pesar de la falta de agua de setiembre y la determinación que había en evitar siembras tardías por la chicharrita, dichos eventos fueron claves para implantar más maíz del que se estimaba. Tambiénvuelve a ponerse en evidencia que, aún en uno de los años más difíciles para el maíz, el cultivo exhibe ventajas productivas y económicas que cuesta ver en la soja.

El ciclo 2024/25 está terminando con la grata noticia de que el spiroplasma no habría ocasionado daños de consideración cuando hace un año atrás la enfermedad explotaba. A diferencia de lo que hoy se observa, el ciclo del maíz 2023/24 terminó con un 18% de pérdidas atribuidas a esta enfermedad transmitida por la chicharrita. Respecto de la chicharrita, el nivel poblacional que se observa en estos días en el norte del país se corresponde a los niveles normales.Incluso, en algunas zonas de Santiago del Estero se han analizado poblaciones de chicharritas y se ha encontrado que estaban libres del vector spiroplasma. Los intensos fríos del invierno pasado, la drástica disminución de la presencia del maíz tardío en el centro y norte del país junto con las prácticas de monitoreo, control y prevención aplicadas parecen haber dados sus resultados. Las expectativas se reavivan y el maíz tendría muy buenas chances de recuperar el terreno perdido en la próxima siembra.
Con más área e iguales rindes, la estimación deja 4 Mt más de maíz
Tiempo inestable, lluvias intermitentes y pronósticos de mal tiempo no permiten un gran avance en la cosecha. Hasta ahora se ha cosechado solo en 20% del área, con resultados que están dentro de lo calculado. Esperando que la cosecha avance, se mantiene la estimación de rindes de marzo. Sí hay cambios en el área de siembra que impactan positivamente en el volumen que se espera producir. En la provincia de Buenos Aires se han sumado 230.000 ha, en Santa Fe 150.000, en Córdoba 80.000 y en Entre Ríos casi 50.000 siguiendo datos del Siber (Bolsa de cereales de Entre Ríos).

Con menos área sembrada, se estima que la producción de soja dejaría 1 Mt menos
Con los ajustes realizados, la siembra argentina se estima en 17,64 M ha, con una superficie cosechable de casi 16,4 M ha. El aumento interanual de área sembrada sería, por lo tanto, de 7%. De esta forma, y sin cambios en los rindes respecto de un mes atrás, se estima una producción de 45,5 Mt.
La cosecha es muy incipiente, y si bien hay buenos indicios en la recuperación del peso de grano en la franja central, se está a la espera de que la cosecha tome impulso para ajustar los rindes, por lo que se mantienen los estimados en marzo.
Por otro lado, restará saber el impacto de las heladas del sábado 5 de enero. Esto resultaría especialmente clave en la provincia de La Pampa, dónde han sido muy fuertes con mínimas que llegaron a -2,5°C. Hay ingenieros de la región que alertan sobre lotes perdidosy daños, pero habrá que aguardar para evaluar adecuadamente.

Informe: Cristian Russo
Fuente: GEA. Guía Estratégica para el Agro. BCR