CREA emitió un comunicado expresando preocupación, ante diversas versiones sobre inminentes cambios en el organismo de INTA
En un contexto de tensión por los recortes presupuestarios y los planes gubernamentales de modificar la estructura y gestión del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la organización Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA) ha hecho pública su postura. A través de un comunicado, CREA manifestó que, si bien el INTA “necesita una transformación profunda”, “no cualquier camino de transformación conducirá al INTA que Argentina necesita”.
CREA y el INTA comparten una historia de cooperación que se extiende por casi siete décadas. Desde la firma del primer Convenio Marco Institucional en 1971, se han concretado 33 acuerdos específicos. Esta colaboración entre CREA y el INTA se describe como sostenida y estratégica, integrando recursos, conocimientos y capacidades técnicas con el objetivo claro de potenciar la competitividad del sector agropecuario, considerado el más relevante para la economía argentina.
La organización reconoce que el contexto global está en transformación y que las instituciones de investigación agropecuaria están repensando su rol. En ese sentido, CREA sostiene que el INTA debe consolidarse como la institución de ciencia y tecnología que el sector requiere para su desarrollo, enfocándose en fortalecer la investigación, la innovación y la generación de conocimiento aplicado.
Sin embargo, CREA advierte que el camino de transformación propuesto por el Gobierno presenta riesgos que consideran inaceptables. El plan oficial plantea reducir de diez a ocho los miembros del Consejo Directivo del INTA. Esta modificación implicaría la desaparición de los dos lugares ocupados por las facultades de Agronomía y Ciencias Veterinarias de las universidades nacionales, así como el representante de CREA.
Los dos riesgos centrales señalados por CREA son:
- La pérdida de autarquía política: Esto ocurriría al otorgar al Poder Ejecutivo Nacional la mayoría absoluta en el Consejo Directivo. CREA considera este riesgo como crítico, ya que el Consejo es el órgano que determina el rumbo de la transformación, la estrategia, los recursos y los procesos de decisión del INTA.
- La exclusión de CREA del Consejo Directivo: CREA argumenta que esto ignora la importancia crucial de la detección de demandas y necesidades del sector productivo para la generación de conocimiento y el desarrollo de tecnologías. Señalan que CREA es el único integrante del Consejo con presencia en todo el país que trabaja en la detección de estas demandas y necesidades, así como en la investigación aplicada para desarrollar soluciones con valor productivo, empresarial, ambiental y social.
CREA se describe como una asociación civil dirigida y financiada por productores y empresarios agropecuarios, cuyo objetivo es sensibilizar, informar y proveer herramientas para la toma de decisiones. Reafirman su compromiso con el futuro del campo y de sus comunidades. A pesar de su rechazo a la forma de la reforma propuesta, la entidad asegura que seguirá trabajando, aportando y construyendo desde su lugar, convencida de que la colaboración y el conocimiento compartido son fundamentales para la competitividad del sector y la evolución del agro argentino.