Las entidades se reunieron con funcionarios de Gobierno y manifestaron que hay puntos innegociables de la escencia del organismo.
En respuesta a versiones que anticipan una inminente reforma estructural del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (CEEA) se reunió este martes 3 de junio con funcionarios del gobierno nacional para expresar su preocupación y solicitar que se respete la esencia del organismo.
El encuentro tuvo lugar en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y contó con la participación del secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Sergio Iraeta; el presidente del INTA, Nicolás Bronzovich; y su vicepresidenta, María “Pilu” Giraudo.
En representación del sector agropecuario estuvieron presentes los presidentes de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Carlos Castagnani; de Coninagro, Lucas Magnano; de Federación Agraria Argentina (FAA), Andrea Sarnari; y la vicepresidenta segunda de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Eloisa Frederking.
Durante la reunión, los representantes de la Mesa de Enlace coincidieron en la necesidad de impulsar ciertos cambios que permitan modernizar y hacer más eficiente al INTA. Sin embargo, fueron categóricos en tres puntos clave que consideran innegociables: el mantenimiento de la autarquía del organismo, su esquema de gobernanza y su actual estructura de Centros Regionales, que consideran una herramienta fundamental para el desarrollo agropecuario del país.
“La preocupación es genuina y el compromiso, firme”, señalaron desde la CEEA, al tiempo que destacaron que los productores del país requieren un INTA con presencia territorial y capacidad técnica para acompañar el crecimiento del sector en todas las regiones. “Cualquier medida que debilite este rol esencial perjudica a todo el sistema productivo y, en consecuencia, al conjunto de los argentinos”, subrayaron.
En el encuentro también participaron Martín Fernández, jefe de Gabinete de la Secretaría de Agricultura, y los consejeros directivos del INTA por parte de CRA, Coninagro y FAA: Sergio Melgarejo, Nicolás Carlino y Gustavo Tettamanti, respectivamente.
La reunión finalizó con la reafirmación del compromiso compartido de trabajar por un INTA fortalecido, que combine eficiencia con presencia federal, y que esté al servicio del desarrollo agropecuario nacional.
La Carta de profesionales de INTA Marcos Juárez
En las últimas horas y en medio de versiones de aplicación de la Motosierra en el INTA, sus empleados expresaron en una carta abierta el difícil momento que atraviesan. El texto difundido es el siguiente:
“100 logros, una misión: por qué el INTA es clave para el futuro de la Argentina”
Frente a versiones que anuncian recortes, cierre de agencias de extensión, despidos y fusiones dentro del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), quienes integramos esta institución queremos invitar a la sociedad a mirar más allá de los rumores.
Hoy más que nunca, es necesario recordar qué hace el INTA, para quién trabaja, y por qué su tarea es estratégica para el presente y el futuro del país.
Durante más de 65 años, el INTA ha llevado adelante una misión pública: investigar, innovar y transferir conocimiento para que el campo argentino crezca con ciencia, equidad y sostenibilidad.
Detrás de esa misión, hay resultados concretos. De hecho, hemos alcanzado más de 100 logros científicos y tecnológicos que hoy forman parte del desarrollo productivo y social de la Argentina.
Entre ellos, destacamos:
1-La clonación de la primera ternera bitransgénica, capaz de producir leche maternizada, un hito biotecnológico reconocido internacionalmente.
2-Variedades de arroz tolerantes a herbicidas, que permitieron recuperar más de 30.000 hectáreas afectadas por malezas en el Litoral.
3-El desarrollo del robot Trakur, una herramienta nacional para la agricultura de precisión.
4-El diseño de la cosechadora de algodón Javiyú, pensada para pequeños y medianos productores, que se exporta a países vecinos.
5-La creación de un biolarvicida contra el dengue, con transferencia tecnológica a laboratorios nacionales.
6-El banco de germoplasma de olivos en San Juan, único en América y reconocido por el Consejo Oleícola Internacional.
7-La secuenciación del genoma de la chicharrita del maíz, plaga que amenaza cultivos clave en el país.
Estos logros no son aislados. Son el resultado de un modelo de trabajo federal, participativo, cercano a las comunidades y al entramado productivo. Desde sus más de 300 unidades operativas en todo el país, el INTA llega donde otros no llegan.
Defender al INTA es defender la soberanía alimentaria, la ciencia pública, el trabajo territorial y el desarrollo federal.
No se trata solo de un organismo técnico. Se trata de una herramienta viva del Estado argentino al servicio del bien común.
Fuente: Agrofy News