La Red de Maíz NEA de AAPRESID presentó resultados de ensayos 2023/24 que dejan algunas puntas para encarar otra campaña que promete poca agua y muchas chicharritas.
A las puertas de una nueva campaña, todas las decisiones relativas al maíz – sobre todo en
una zona como el NEA – son más que difíciles. Desde el hecho de sembrar o no, hasta qué
híbrido sembrar y cómo “se las verá” cada lote, entre el pronóstico de Niña y la chicharrita.
La Red de Maíz NEA de Aapresid acerca en su último Informe anual aprendizajes de la
pasada campaña para, al menos, sumar herramientas que faciliten las decisiones.
Los resultados de ensayos en 13 sitios en Chaco, Formosa, Santiago del Estero y norte de
Santa Fe son la “Crónica de una muerte anunciada”, ya que entre el déficit hídrico – sobre
todo entre enero y marzo, coincidentes con los períodos críticos del cultivo -, los golpes de
calor y la chicharrita, los rindes de los maíces del NEA promediaron los 2,386 kg/ha, un
63% por debajo de la 22/23.
También evidenciaron fuerte variabilidad entre sitios, desde 871 kg/ha registrados en
Corzuela, Chaco, hasta/ 4,465 kg/ha en Sachayoj, Santiago del Estero.
Si bien según la Red la elección del híbrido sólo representa un 7% del rendimiento,
siendo el ambiente el que tiene la última palabra, los resultados muestran que fue posible
identificar un pequeño grupo de híbridos que destacaron en rinde para cada una de
las subzonas, y un híbrido en particular que sobresalió por su alta adaptabilidad,
mostrándose entre los primeros del ranking a lo largo de los 13 sitios evaluados.
Otro gran problema que la mayoría de los híbridos no logró sortear fue el quiebre,
observándose valores promedios superiores al 50% para todos los sitios evaluados.
Chicharrita: ¿hay diferencias de susceptibilidad entre híbridos?
Pionera en relevar el comportamiento de híbridos ante el Complejo de Spiroplasma en maíz, transmitido por la chicharrita Dalbulus maidis, la Red NEA encontró que, si bien hoy el mercado no ofrece híbridos con tolerancia o resistencia específica a la enfermedad, se
vieron diferencias significativas entre híbridos de maíz en cuanto a desarrollo de
síntomas de la enfermedad.
Este buen comportamiento de ciertos materiales ante Spiroplasma encendería un faro en la
elección del híbrido como herramienta importante para mitigar el efecto de esta
problemática.
Sin embargo, desde la Red advierten que el análisis se apoyó en la observación de visual
de síntomas en plantas, por lo que es necesario profundizar en estudios relacionados con
mecanismos de tolerancia y efectos sobre variables del rendimiento – como números y
peso de granos -, y que este ensayo provee información valiosa para futuros trabajos de
caracterización de tolerancia en hibrido a la enfermedad.
En otra línea, se evaluó el perfil sanitario de híbridos frente a tizón foliar común del maíz
(TFC), para la cual también se vieron diferencias estadísticas significativas entre híbridos.
Maíz: hacer o no hacer
El maíz es un cultivo estratégico para la sustentabilidad de las empresas agropecuarias en todos los sentidos, en especial en ambientes frágiles como los del norte argentino.
Desde la Red NEA, advierten que resulta fundamental seguir apostando al cultivo por los múltiples beneficios en cuanto a mejora de la estructura física del suelo, el aporte
de abundante cobertura rica en carbono, la interrupción de ciclos de plagas y la diversificación de riesgos.
El Coordinador de la Red, Ing. Agr. Carlos Simón (INTA), destaca algunas estrategias para que, a la hora de arriesgar, aumentan las chances de salir airosos.
En primer lugar está la correcta elección de la fecha de siembra, evitando demorarla más allá de mitad de enero. Luego está la elección del lote, donde estudios de la Red muestran que el agua útil a la siembra y el % de materia orgánica son variables de gran incidencia en el rinde. En la misma línea, es clave asegurar dotaciones de nitrógeno aceptables, de 190 kg N (en suelo + fertilización) en adelante.
Por último, es clave saber optar entre híbridos templados y tropicales según cada ambiente.
En cuanto a “chicharrita y compañía”, el foco deberá ponerse en el control de maíces
guachos, la concentración de las siembras y el monitoreo exhaustivo. En esa línea, la
Red Nacional de trampas de monitoreo de D. maidis liderada por AAPPCE, AAPRESID,
CREA, la EEAOC, INTA Y MAIZAR aportan información valiosa para seguir de cerca el
avance del vector.
Fuente: Aapresid