Desde la Secretaría de Agricultura destacan el panorama positivo que vive el sector.
El sector lácteo nacional experimenta un crecimiento muy importante en el primer semestre de 2025, impulsado por una fuerte inversión en tecnología y la recuperación del stock ganadero, consolidando su posición como referente de innovación y competitividad. La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía de la Nación destaca un panorama altamente positivo, reflejando una tendencia alcista en todos los eslabones de la cadena.
Según el último análisis de la Dirección Nacional de Lechería, con base en datos del INDEC, la producción nacional de leche creció un notable 12% entre enero y junio de 2025, en comparación con el mismo período del año anterior. Este incremento se ve apuntalado por una sólida base productiva. El stock de vacas lecheras mostró una recuperación significativa, registrando un aumento del 5,3% en 2025 respecto al año anterior, de acuerdo con los tableros dinámicos del SENASA.
Sin embargo, el salto más notorio se observa en la adopción de tecnología de vanguardia en los tambos. Este es un punto clave que diferencia el crecimiento actual:
• Robots ordeñadores: El uso de estos equipos se ha disparado, pasando de 370 unidades instaladas en 2023 a más de 550 en la actualidad. Esta expansión demuestra una adopción cada vez más generalizada de sistemas automatizados que no solo mejoran la eficiencia operativa, sino que también contribuyen al bienestar animal.
• Rotativos o calesitas de ordeñe: El número de estas instalaciones se ha duplicado, alcanzando las 40 en todo el país. Los rotativos optimizan los procesos de ordeñe y permiten un manejo más ágil de grandes rodeos, lo que es fundamental para el aumento de la producción.
Estos avances marcan un cambio de paradigma en la lechería argentina. El sector no solo está incrementando sus volúmenes de producción, sino que lo hace con un fuerte anclaje en la innovación tecnológica, el financiamiento, la mejora continua y la competitividad internacional. Se vive un «momento de expansión tecnológica sin precedentes», acompañado por un crecimiento sostenido en sus principales indicadores productivos.
