El Instituto de Clima y Agua que funciona en la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Castelar del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), pronosticó «mayor probabilidad de condiciones normales durante el verano», en lo que respecta a temperaturas y lluvias.
Esta previsión está incluida en la edición de diciembre de la revista mensual de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y fue desarrollada por los técnicos Romina Mezher, Natalia Gattinoni, Patricio Oricchio y Roberto De Ruyver del Inta.
El horizonte planteado por el organismo oficial coincide con el último pronóstico estacional de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, pero contrasta un poco con los que expresaron el climatólogo de la Bolsa de Comercio de Rosario, que habló sobre probabilidad de «pulsos secos» que afecten los rindes de soja y maíz; y el director del Laboratorio Climatológico Sudamericano, quien advirtió sobre riesgos de golpes de calor en febrero.
Neutro o Niña débil
De acuerdo al reporte difundido por CRA, «los modelos de pronóstico indican la persistencia de un fenó meno ‘La Niña’ débil para el trimestre diciembre-enero-febrero, con una probabilidad de ocurrencia del 55 por ciento en la región del Océano Pacífico Central, tal como se está observando en estos últimos meses».
«De todos modos, los valores se encuentran en el límite entre condiciones neutras o de Niña débil, lo que en términos prácticos se traduciría en lluvias que, en términos generales, serían más cercanas a las normales», señala la estimación del Instituto de Clima y Agua.
En concreto, «se espera que durante diciembre y enero, sobre la región pampeana, las condiciones meteorológicas sean normales para la época del año, con la variabilidad natural que posee el comienzo del verano, donde se pueden observar períodos con temperaturas cálidas y con precipitaciones normales con ocurrencia de algún evento localmente más intenso».
