La empresa lanza la campaña ‘La Re-evolución de la genética es hoy’, que atesora la optimización genética en el país.
Productores, científicos y técnicos, nacionales y del exterior, referentes del sector público y
privado, empresarios, inversores y científicos se darán cita el 12 y 13 de septiembre
próximo en el Centro Provincial de Convenciones, en Paraná, Entre Ríos, donde se
realizará la segunda edición del Congreso Internacional de Maíz (CIM 2023), organizado por Maizar, Región Centro, Maizall y La Pastelera Producciones. Entrada libre, gratuita y con
cupos limitados. Inscripciones en www.congresointernacionaldemaiz.com.ar
Álvaro Moreno, Gerente Nacional de Marketing de KWS Argentina, puso la luz sobre la
importancia que tiene el Congreso para la compañía: “Es nuestro cultivo foco en Argentina,
así como en Brasil y Uruguay.
Además, es el segundo cultivo en importancia para la compañía a nivel global, sólo por detrás de la remolacha azucarera, que fue el cultivo sobre el que se erigió y fundó KWS, en 1856. Tal implicancia tiene el maíz para KWS que también es el segundo cultivo sobre el que practicamos las mayores inversiones en investigación y desarrollo”. Agregó que ser parte del evento es fundamental para “revalidar la historia de la empresa y el rol protagónico en la generación de información para un cultivo clave para la firma, para el país y para la región”.
KWS lanzará en el Congreso Internacional de Maíz la campaña llamada ‘La Re-evolución
de la genética es hoy’. Se trata de un concepto que atesora 18 años de mejoramiento
genético en Argentina, en la práctica significa que lanzamos al mercado la cuarta
generación de híbridos de maíz, superando nuestros propios estándares de calidad para
potencial, sanidad y estabilidad.
Al mismo tiempo, presentarán tres híbridos al mercado: KWS 14-408 VIP3, KWS 16-607
VIP3 y KWS 16-959 VIP3. “Estas novedades más otras asociadas a sanidad de maíz en
cultivos tardíos, serán el eje de nuestra participación en el Congreso”, señaló Moreno.
Alfredo Paseyro, Director Ejecutivo de la Asociación de Semilleros Argentinos, explicó:
“Sería ideal que Argentina pudiese adoptar las tasas de agregado de valor al maíz que tiene
Entre Ríos. Nos interesa estar porque todo comienza con la genética de la semilla. También
nos interesa el tema de la presión de plagas, el manejo del riego y particularmente la
transformación del maíz en proteína animal”.
En sintonía, el Gerente Nacional de Marketing de KWS Argentina acotó: “Todo lo asociado a
la cadena de maíz es lo más relevante dentro del ecosistema agropecuario. Nos
encontramos en cuenta regresiva para el comienzo de la siembra y seguimos muy
atentamente las mismas preocupaciones e incertidumbres que tienen nuestros productores.
Ello involucra a la tendencia climática y la recuperación de las reservas hídricas; el aumento
de los costos (fertilizantes y combustibles, principalmente) y, más recientemente, todo
aquello relacionado a aspectos macroeconómicos”.
Para culminar, Álvaro Moreno se mostró entusiasmado de cara a la campaña 2023-24;
indicó que será un ciclo bisagra para la producción maicera argentina, si es que se recupera
la condición climática general de todas las zonas agrícolas. Agregó que “más allá de que
será un ciclo que estará marcado fuertemente por la política y economía, en lo que viene
productivamente volveremos a la senda de los aumentos de producción, quebrando la
tendencia bajista de las últimas tres campañas ocasionadas por La Niña”. Para cerrar, el
representante de KWS aseguró: “También dejará en evidencia la identificación plena que
tiene el productor argentino por el cultivo de maíz, más allá de las adversidades, y también
será una campaña muy favorable para el sostén de las rotaciones (gramíneas/oleaginosas),
acompañando a la superficie que ya se sembró de trigo”.
