INTA inscribió tres variedades de triticale forrajero

Son tres cultivares que combinan aspectos del trigo y el centeno; aseguran que son ideales para el pastoreo directo.

El INTA presentó tres variedades de triticale forrajero. Se trata de un desarrollo de INTA Marcos Juárez, Córdoba que inscribió a Barbol INTA, Molle INTA y Concor INTA.

Estos desarrollos, combinan la calidad del trigo con la rusticidad del centeno. Además, aseguraron que tienen un alto potencial de rendimiento de granos y forraje, e ideales para el pastoreo directo durante el invierno.

Desde el INTA señalaron que el triticale (X Triticosecale Wittmack) es un eslabón fundamental en los pastoreos durante el invierno. “En el mundo, al principio, el mejoramiento de este cereal estuvo enfocado en el rendimiento y la calidad del grano, pero en Argentina avanzamos hacia la obtención de cultivares forrajeros por su incorporación en los planteos pastoriles”, indicó Jorge Fraschina, especialista en cultivos y referente del INTA Marcos Juárez.

El invierno es un periodo clave, donde disminuye la productividad de pasturas o pastizales. Por este motivo, los cereales de invierno toman protagonismo y el triticale es un cultivo que se adapta a una gran diversidad de ambientes, posee múltiples usos potenciales y puede emplearse en la alimentación humana y animal.

“En la mayor parte del mundo el uso principal es como grano forrajero en la alimentación animal, mientras que en la Argentina se emplea para consumo fresco, henificado y como grano forrajero”, señaló Fraschina.

Las variedades inscriptas son: Barbol INTA, Molle INTA, Concor INTA.