La oleaginosa ganó 6% en la primera semana de 2018. Las cotizaciones a futuro invitan a coberturas pero se aguarda que puedan seguir elevándose.
De la mano del comienzo de la rebaja gradual de las retenciones y de una demanda activa por parte de la industria, el precio de la soja en el mercado local alcanzó un récord nominal, al superar la barrera de los 5.000 pesos en el Mercado de Rosario.
Según informa la Bolsa de Comercio de esa ciudad, la tonelada está cotizando por estas horas a 5.005 pesos, lo que significa un 6 por ciento por encima del cierre del último día de diciembre, a 4.720 pesos.
Paralelamente, la sequía que está impactando fundamentalmente en el centro-norte de Buenos Aires y en el Noa y Nea ha hecho que se estén reformulando las expectativas de cosecha 2017/18, lo que lógicamente podría impactar en los valores de la oleaginosa.
Panorama
«Claramente vamos a un escenario de menos cantidad de soja por los problemas climáticos: podríamos estar en torno de los 52 millones de toneladas. El precio disponible está en 5.000 pesos, pero si vendes a mayo esta en 5.378; a septiembre, en 5.938; y a noviembre, en 6.248. No son precios para despreciar, pero si la seca sigue no te juegues todo a estos precios porque podemos verlos más arriba», indicó el analista Salvador Di Stefano, en un artículo de opinión.
Desde su punto de vista, hay varios indicadores que invitan a pensar en un aumento de la soja para 2018, independientemente del problema de la sequía.
Explicó que «el mundo está en un cambio estructural; Estados Unidos bajó fuertemente los impuestos, esto le generaría un déficit fiscal muy grande, lo que traerá aparejado más inflación y por ende suba de tasas. Hay fondos internacionales que están comprando futuros en materias primas para cubrirse de una eventual suba de la inflación y, como resguardo de valor, ante una suba meteórica de la bolsa americana. Conclusión, en los próximos meses vamos a tener demanda de materias primas como resguardo inflacionario, por expectativa de menores cosechas, y por mayor actividad en el resto del mundo».
Demanda y opciones
En tanto, el newsletter «Escenarios Granarios» difundido por el Centro de Gestión Agropecuaria (CGA) de la Fundación Libertad prevé «un mercado atado a los vaivenes climáticos, que puede traer aparejado un aumento de la volatilidad».
Por eso, consideró «importante que el productor no deje sus márgenes de rentabilidad librados al azar y tome coberturas».
«A modo de ejemplo, para aquellos que buscan asegurarse un precio mínimo y, por ende, estar abiertos a eventuales alzas en el mercado, una herramienta apropiada es el put sintético que combina en simultáneo la venta de un forward y la compra un call. El resultado más bajo que plantea esta estrategia es de 256 dólares por tonelada y, a partir que el precio del futuro supera al strike del call, como puede ser a 266 dólares; acompaña la suba, pagando la diferencia entre el valor del futuro en el mercado y 266 dólares que es precio de ejercicio de la opción de compra», indicó el CGA.
En tanto si se opta por trasladar la entrega de la cosecha, el mercado brinda como alternativa un plus que ronda los 16,50 dólares por tonelada por sobre las posiciones a mayo. Esto, siempre y cuando, se esté en condiciones de entregar la mercadería en noviembre para obtener una tasa implícita directa del 6,4 por ciento en dólares.
Factores
En este marco, el CGA destacó que la devaluación del dólar en Argentina no pasó desapercibida en Chicago, ya que propone mayores ventajas comerciales respecto al mercado norteamericano.
En el plano doméstico, luego de un diciembre cargado con vencimiento de fijaciones, la necesidad de las fábricas abrió paso a una suba en los valores abiertos en el segmento disponible, que es lo que empujó a la soja a superar los 5.000 pesos.
Un dato clave: en las próximas horas, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (Usda) dará a conocer su estimación mensual de oferta y demanda de granos a nivel mundial, más los reportes de stocks trimestrales en EE.UU. «De producirse cambios en los guarismos referidos a Sudamérica, tendrán una incidencia directa en las cotizaciones de Chicago», indicó el informe.