Vibrance Maxx contiene Sedaxane, la primera carboxamida diseñada exclusivamente para el tratamiento de semillas. Hay densidades de siembra mínimas que maximizan los rindes, pero para lograr un buen resultado es clave el buen tratamiento de semillas.
La protección de un cultivo comienza antes de la siembra. Son muchos los factores ya existentes en el suelo que pueden afectar la implantación, entre ellos están los insectos como el gusano alambre o el gusano de raíz, los nematodos que se alimentan de las raíces y sobre todo enfermedades como Rhizotocnia, Phytium o Fusarium.
Según explicó Leandro Barcos, Gerente de Seedcare para Latinoamérica Sur de Syngenta, la investigación en sanidad de las raíces tiene un gran potencial. Y aseguró: “El lanzamiento de una nueva molécula demanda al menos 8 años de investigación y sólo 1 de cada 100.000 moléculas evaluadas llega al mercado. En el año 2011 lanzamos Sedaxane como la primera molécula, de la familia de las carboxamidas, exclusiva para el tratamiento de semillas. Es una molécula fungicida de amplio espectro amigable con el medio ambiente. Hoy Sedaxane es parte de un nuevo lanzamiento, Vibrance Maxx un tratamiento para semillas de soja que permite obtener una protección superior”.
Vibrance Maxx es un fungicida de amplio espectro para el tratamiento de semillas de soja. Protege la germinación y el desarrollo inicial del cultivo, permitiendo el establecimiento de un stand de plantas óptimo. Su fórmula combina 3 principios activos con diferentes modos de acción: Fludioxonil, Metalaxil-M, y Sedaxane.
Al respecto Pablo Ruggeroni, gerente del Instituto Seedcare de Syngenta, y Alejo Costa, gerente técnico de Seedcare de Syngenta explicaron que Vibrance Maxx es un producto insuperable en el control de Rhizoctonia y tiene un excelente control de las enfermedades de las raíces, Damping off y hongos de la semilla. Además es perfectamente compatible con los inoculantes y los insecticidas que se usan en los tratamientos de semillas.
La importancia de la siembra ideal
Seguidamente Lucas Borras, investigador del Conicet y docente en la Facultad de Agronomía de Rosario sostuvo que la siembra es un momento crítico y lo que hacemos condiciona el futuro del lote. “¿Cuánto perdemos cuando sembramos mal? Para responder a este interrogante realizamos ensayos en el marco de un convenio existente entre Syngenta y la Facultad de Agronomía de Rosario mediante el cual tratemos de Identificar la densidad de siembra mínima que maximiza los rindes. En principio recomendamos no sembrar cantidades de semillas excesivas y considerar que en campos con estrés la siembra uniforme genera un mejor estado del cultivo y beneficia los rindes. Además bajar la densidad de siembra genera ahorros en semillas pero, para lograr de cada semilla una planta es fundamental el uso de tratamientos de semillas” sostuvo.
Parte de los resultados que presentó Borras en soja indican que para grupos cortos sembrados tempranos lo recomendado es entre 10 y 20 plantas por metro cuadrado y para grupos cortos en siembras tardías la recomendación es entre 30 y 40 plantas por metro cuadrado. Para grupos largos sembrados temprano se recomiendan 10 plantas por metro cuadrado y para esos mismos grupos en siembras tardías se recomiendan entre 10 y 20 plantas por metro cuadrado.
Con respecto a los ensayos realizados con semillas tratadas con la molécula Sedaxane, Borrás explicó: “Luego de tres años de evaluaciones realizados en la zona de Zavalla comprobamos notables mejorías en semillas tratadas con Plenus + Vibrance en comparación con semillas sólo tratadas con Plenus. En rindes se tradujo en 500 kilos de diferencia a favor del primer tratamiento. Ese efecto se debió a una mejor fijación en el número de granos”.
Finalmente Lucrecia Curetot del INTA de Pergamino agregó: “Vimos muchas diferencias en tratamientos profesionales y tratamientos realizados por el productor, sobre todo en la uniformidad de cobertura de los productos sobre las semillas de soja. Los malos tratamientos tienen impacto en la desuniformidad de los cultivos. Entre las enfermedades de soja que estuvieron presentes en la campaña pasada relevamos Fusarium, Pythoptora y Rhizoctonia que afectaron las vainas y semillas disponibles para esta nueva campaña”.