AGROEMPRESA ARGENTINA INAUGURA CONCESIONARIA DE MAQUINARIAS EN RIO PRIMERO.

Aunque la nueva sede de Agroempresa Maquinarias viene funcionando desde octubre pasado, finalmente sus modernas instalaciones ubicadas en el ingreso a Rio Primero serán inauguradas formalmente con una recepción para clientes y amigos de la casa.

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«Es una buena oportunidad para tomar contacto con todas las novedades de la marca Case IH, maquinaria de última generación que acerca tecnología y prestaciones de avanzada, con equipos de agricultura de precisión y hasta un taller de asistencia. Un motivo de orgullo para nosotros», afirmó Fernando Mizzau, gerente de la Compañía Agroempresa Argentina división Maquinaria Agrícola.

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La sede en Rio Primero es una más de las sucursales que, estratégicamente, han sido localizadas en diversos puntos del país. La intención de la empresa es reforzar los mismos servicios que ofrece su casa central de Sinsacate. Esto es: Atención comercial las 24 horas, Venta permanente de repuestos, Variados planes de financiación y mejorar la atención post-venta.

Además, el dealer cuenta en la parte posterior con un taller que fue montado bajo las normas y especificaciones de la marca. Todas facilidades que ayudan a que los clientes y amigos deAgroempresa no interrumpan sus tareas de campo por pérdidas de tiempo.

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Matías Blas, responsable de Marketing del Grupo Agroempresa, destacó la satisfacción y el regocijo que genera esta inauguración. Al respecto, dijo: “La zona de Río Primero es un punto neurálgico de tráfico de máquinas agrícolas que vienen del sur a la siembra y del norte a la cosecha. Para una empresa familiar como la nuestra, este tipo de eventos son el premio por hacer las cosas bien y por el esfuerzo constante que todos los integrantes del grupo realizamos diariamente para brindar un mejor servicio a nuestros clientes”.

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Con un crecimiento sostenido y constante, Agroempresa ya cuenta con 13 puntos de venta, con sucursales propias, en el centro norte del país en lo que hace a agroquímicos, semillas y acopio. La meta, según Blas, es siempre una: «Estar más cerca del productor y contratista».