El paro de 72 horas organizado por tres de las cuatro entidades de la Mesa de Enlace concluyó en la medianoche de este viernes, con un fuerte cruce entre el gobierno, que minimizó la «trascendencia» de la medida, y el ruralismo, desde donde se exaltó el «amplio acatamiento».
Luego de sumar durante la última jornada de lock-out a los tambos, que se negaron a vender su materia prima a la industria, la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (CONINAGRO) y Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) aseguraron que la protesta desnudó «el fracaso de la política agropecuaria que llevó adelante este gobierno, en los últimos doce años».
EL PUERTO DE ROSARIO NO SINTIÓ EL EFECTO DEL PARO.
En la Terminal de Rosario, en el segundo día del cese de comercialización de granos de los tres que impulsaban las entidades, ingresaron 2.000 camiones más que el jueves pasado. Este dato, se contrapone con la falta de animales para rematar en Liniers, donde el paro se sintió de manera contundente.